"Canales-La Magdalena" Un solo pueblo

Porque sucedió que algunos de sus contertulios en cierta peña -no sé si del <<Exprés>>
Foto enviada por Coral



CORAL. ¿Sigue celebrándose esa fiesta?
¡Buenos días a tod@s!
Así es Ángel, todavía se celebra. Como te decía Yoli las fiestas de Canales-La Magdalena son: en mayo La Ascensión, en julio La Magdalena, en junio Corpus y en agosto San Roque. La fiesta mayor siempre ha sido Corpus.
La Magdalena es la Santa patrona de la Iglesia que está en el barrio de La Magdalena.

Por cierto dicha Iglesia, de la que acompaño foto, está construida por mi abuelo Jorge. (padre de mi padre) Hoy día es parroquia.
Como ves estamos hablando de un pueblo ... (ver texto completo)
Bueno, pues lo dicho:

Mañana, quizá mañana vivamos...
Porque hoy sin darnos cuenta
pasamos sin enterarnos.
Y a veces, sin desearlo, es cotidiano.

Coral

¡FELIZ NOCHE AMIGAS, AMIGOS, DE ESTE FORO Y A TOD@S LOS PAISANOS, VECINOS Y FAMILIARES DE CANALES-LA MAGDALENA!
Congestionábase el menguado crucero con aquella ola de carne humana que rompía contra las paredesde la iglesia parroquial, estrujándose, moviéndose sin sosiego, como si los fieles todos pretendieran despojarse del calor que sentían arrojándoselo unos a otros, en tanto que el cura bonachón y gordiflote, cuyas gafas de oro acertaban a poner una nota irónica en su rostro arrebolado, enroquecía por contraste, prodigando su elocuencia a grandes voces y dejando cada periodo en su punto previsto para acudir ... (ver texto completo)
Buscando la sombra, huyendo de aquel ambiente de asfixia, procuraban las jóvenes lugareñas distraerse algunos momentos en la plaza, charlando sin descanso, entre risas y guiños maliciosos, y contemplando a los mozos, que jugaban en mangas de camisa.
Ya sabían ellas la novedad. José María, el hijo del médico, se hallaba en francaconvalecencia, y su padre le permitía salir a divertirse. Allí estaba, entre sus camaradas, con aquella expresión siempre atractiva de su semblante, que, sin embargo, únicamente sonreía para evitar el tener que hablar, y dejando admirar en él la actitud un poco tímida, el delicado perfil de su figura, que fascinaba a las mozas, enamoradas del muchacho y nunca hartas de mirarle.
Pero los comentarios no cersaban tan sólo sobre la belleza delicada del pobre José María. En el pueblo, todo se había sabido ya. ¡Que mala suerte! El primer año que había ido a estudiar Medicina, a Valladolid, tner que dejarlo a mitad de curso para venir casi muerto, de tan grave como había venido, pues de sobra llegaron a todos a enterarse del estado en que hubieron de traerle a casa. ... (ver texto completo)
Y en la plaza campo de acción, desde aquella hora, de la mocedad, que la convertía el bolera desparramábase la devota muchedumbre, camino todos de sus casas, donde les esperaba el interminable banquete, de pesados manjares, con que la rústica avidez saciaba su glotonería una vez al año.
Mientras los futuros mozos seguían volteando las campanas, abajo en la plaza procuraba la juventud masculina atraerse con sus relinchos las miradas de las mozas, que sonreíanse de lejos al salir de misa.
Sus semblantes ... (ver texto completo)
Congestionábase el menguado crucero con aquella ola de carne humana que rompía contra las paredesde la iglesia parroquial, estrujándose, moviéndose sin sosiego, como si los fieles todos pretendieran despojarse del calor que sentían arrojándoselo unos a otros, en tanto que el cura bonachón y gordiflote, cuyas gafas de oro acertaban a poner una nota irónica en su rostro arrebolado, enroquecía por contraste, prodigando su elocuencia a grandes voces y dejando cada periodo en su punto previsto para acudir a enjuagar el sudor de la frente con el blanco pañuelo, que parecía un emblema de paz tras imponente oratoria ingerida por aquella retentiva feliz.
Al salir del templo, aunque el fulgor intenso del sol quemaba con ahinco, todos entrebeían los labios para respirar ansiosamente el aire libre. Con el cielo despejado, el mediodía presentábase bochornoso, como si aún aquella atmósfera quisiera recordar la caleturienta gestación de los campos, el parto doloroso de la tierra, cuyo aliento febril se respiraba bajo la caricia ardiente que había agostado los frutos muertos en las eras de polvorienta marillez. ... (ver texto completo)
Porque sucedió que algunos de sus contertulios en cierta peña -no sé si del <<Exprés>> o del <<Colón>>- eran, como se advirtió oportunamente, socialistas acérrimos y lo bastante insensatos como para suponer que las cosas iban de broma y, levantando la voz algo más de lo oportuno, se permitían expresar allí sus sentimientos, exponer sus deseos y manifestar sus opiniones que, como supondrán mis lectores, estaban bastante encontradas con las que oficialmente eran admitidas en la Zona Nacional.