LUIS MORLA GONZÁLEZ (03/08/1913-11/02/2012)
<Rogué a Dios que me lo diera todo para así disfrutar de la vida, pero Él me dio la vida para que pudiera disfrutar de todo>
Vivirás mientras vivamos los que te queremos. Guardaremos en nuestro corazón todas las cosas valiosas que nos dejas y que nos ayudarán a continuar nuestro camino sin ti. Te recordaré y mientras lo haga estaremos juntos. Te quiero, te lo repito ahora y te lo diré en sueños todas las noches de mi vida.
Ahora ve, padre mio. Vuela libre y dichoso más allá de los cumpleaños y a través de la eternidad, que nos encontraremos alguna que otra vez cuando lo deseemos, en medio de la única celebración que jamás puede terminar. Paz profunda para ti!
Querido Calecho: Coincidiréis conmigo en lo mucho que cuesta, cuando llega el final, dejar libre a la persona que quieres para que pueda morir en paz.
Mi padre ha muerto con alegría en el corazón sabiendo que ha vivido plenamente y que ha cumplido con todo lo que vino a hacer en este mundo. Os aseguro que se ha ido con los deberes hechos y ha sido un ejemplo para todos los que le conocimos en vida.
Y ahora, es tiempo para el agradecimiento por vuestra solidaridad y cariño, por acercarme el recuerdo alegre y solícito de mi padre. Sabed que mientras escribo estas palabras no estáis cerca de mi corazón… estáis en mi corazón. Todos vosotros habéis sido regalos en mi vida y me siento muy honrada de tener vuestro apoyo y os agradezco lo que aprendo de cada uno de vosotros. Gracias igualmente por las flores, símbolo de la vida, el amor, la belleza, la perennidad de las cosas y la eternidad de los sentimientos. Mi pueblo, mis raíces, ha estado con nosotros en lo bueno y lo menos bueno.
En nombre de mi padre q. e. p. d., mi madre Amada y mis hermanos Juan y Jose, MUCHÍSIMAS GRACIAS por vuestra compañía. Mariajesús Morla ... (ver texto completo)
<Rogué a Dios que me lo diera todo para así disfrutar de la vida, pero Él me dio la vida para que pudiera disfrutar de todo>
Vivirás mientras vivamos los que te queremos. Guardaremos en nuestro corazón todas las cosas valiosas que nos dejas y que nos ayudarán a continuar nuestro camino sin ti. Te recordaré y mientras lo haga estaremos juntos. Te quiero, te lo repito ahora y te lo diré en sueños todas las noches de mi vida.
Ahora ve, padre mio. Vuela libre y dichoso más allá de los cumpleaños y a través de la eternidad, que nos encontraremos alguna que otra vez cuando lo deseemos, en medio de la única celebración que jamás puede terminar. Paz profunda para ti!
Querido Calecho: Coincidiréis conmigo en lo mucho que cuesta, cuando llega el final, dejar libre a la persona que quieres para que pueda morir en paz.
Mi padre ha muerto con alegría en el corazón sabiendo que ha vivido plenamente y que ha cumplido con todo lo que vino a hacer en este mundo. Os aseguro que se ha ido con los deberes hechos y ha sido un ejemplo para todos los que le conocimos en vida.
Y ahora, es tiempo para el agradecimiento por vuestra solidaridad y cariño, por acercarme el recuerdo alegre y solícito de mi padre. Sabed que mientras escribo estas palabras no estáis cerca de mi corazón… estáis en mi corazón. Todos vosotros habéis sido regalos en mi vida y me siento muy honrada de tener vuestro apoyo y os agradezco lo que aprendo de cada uno de vosotros. Gracias igualmente por las flores, símbolo de la vida, el amor, la belleza, la perennidad de las cosas y la eternidad de los sentimientos. Mi pueblo, mis raíces, ha estado con nosotros en lo bueno y lo menos bueno.
En nombre de mi padre q. e. p. d., mi madre Amada y mis hermanos Juan y Jose, MUCHÍSIMAS GRACIAS por vuestra compañía. Mariajesús Morla ... (ver texto completo)