Clama el viejo narrador contra aquella costumbre, de un continuo retoñar en las mozas de hoy. Acaso la iracundia de sus palabras revele que andubo prendado de la linda forastera, y el tono de su narrar se imite a un sollozo por la suerte de la niña gentil. Acaso esta memoria le traiga algún remordimiento por haber gozado también de aquella costumbre en sus mocedades. Ello no le ha consentido cejar en su condena de aquel uso, que a las mozas de ahora las hizo traer su origen de otras hembras que sin ... (ver texto completo)
<<Adiós, que no he de volver
a cantar a tu ventana;
mañana voy a la guerra,
ya no me verás mañana.>>
Al escuchar la canción, las mozas humillan, sin saber porqué, la frente, con esa condición de la mujer, que da igual modo esconde el rubor de la inocencia y la vergüenza de su pecado. No entran los mozos, como otras noches, a deseos del abuelo, que hoy se ha dormido, por que se vean los semblantes más a la luz y alcensu frente las conciencias honradas; que la puerta abrieron ya las mozas con ... (ver texto completo)
a cantar a tu ventana;
mañana voy a la guerra,
ya no me verás mañana.>>
Al escuchar la canción, las mozas humillan, sin saber porqué, la frente, con esa condición de la mujer, que da igual modo esconde el rubor de la inocencia y la vergüenza de su pecado. No entran los mozos, como otras noches, a deseos del abuelo, que hoy se ha dormido, por que se vean los semblantes más a la luz y alcensu frente las conciencias honradas; que la puerta abrieron ya las mozas con ... (ver texto completo)