Buenas tardes,
y aquí olisqueando como perritas detrás de su novio me he encontrado un poema o relato, mí no entender, precioso, si es que la curiosidad-dice el refrán-mató al gato, en este caso no ha sido así, menos mal, pobre Tuly, tan suave es ella como el burrito de Platero y yo. Aunque algo cobardona fue, cuando le vio las orejas a la mastina... ja...
a refugiarse con su amo, cachissssssss... un día le embrisco a Pikolo y se la liga seguro.
y aquí olisqueando como perritas detrás de su novio me he encontrado un poema o relato, mí no entender, precioso, si es que la curiosidad-dice el refrán-mató al gato, en este caso no ha sido así, menos mal, pobre Tuly, tan suave es ella como el burrito de Platero y yo. Aunque algo cobardona fue, cuando le vio las orejas a la mastina... ja...
a refugiarse con su amo, cachissssssss... un día le embrisco a Pikolo y se la liga seguro.
Buenaaaas! jajjajajaaa pobre Tuli, es que la amiguita que pretedía echarse era un poco grande, mucho mejor el Pikolo ¡donde vas a parar!