Tía Elvira nos deleitó recitando
poesías, bueno más que recitar las dice, y te quedas embobada, además de por lo bien que lo hace, es una gloria oírla, por la memoria tan impresionante que tiene pues alguna de ellas de Espronceda, y otras de Gabriel y Galán son largísimas. Un auténtico lujazo disfrutar esos momentos.
Aquí tenemos a los dos hermanos en amena y larga charla y a Ofelia y Ana Marta
Es un placer compartilas con vosotr@s.