Llenan las calles los desfiles de Pendones, las degustaciones de productos de la tierra, los pasacalles musicales, los carros engalanados y las exhibiciones de deporte autóctono.
Pero además San Froilán es tiempo para la imaginación, para que los niños descubran El Jardín Encantado, o para que los jóvenes disfruten de la
música más actual en los numerosos conciertos que animan nuestras plazas. En San Froilán nuestra ciudad tiene un sello propio, y gana en personalidad, convirtiendo estas fechas en la ocasión perfecta para que los visitantes que se acercan por primera vez a
León descubran un lugar acogedor, bello y rico en historia y tradición.