-Para LIBERTAD:
Aquí envío el pajarito de Yoli-MUY APROPIADA LA FOTO PARA EL MENSAJE EN CUESTIÓN-Después de la tormenta siempre vino la calma, y yo creo que aunque experiencias malas hemos tenido todos, las tormentas tienen algo especial, hay algo allá arriba, ó aquí abajo también, que nos cautiva-A MÍ PERSONALMENTE ME GUSTAN LAS TORMENTAS-Claro está en un lugar- A LA ABRIGADA-como se suele decir.
-No hace mucho, pensaba que a mi madre no le asustaba nada, nada, y cual fue mi sorpresa, que un día-HABÍA SALIDO DE COPICHUELAS CON UNOS COLEGAS (digo que fui yo, noooo mi madre), es que a veces me pierdo por las alturas, dicho sea de paso: A lo que iba, llego a casa, y le pregunto a la mama ¿Qué tal?, y me contesta, estoy temblando, no he podido prender ojo:
- ¿Y por qué mama?. Por la tormenta, me confesó que las tenía pánico-LA VERDAD ES QUE HACÍA UNA NOCHE DE PERROS-Sólo rayos por todas partes, truenos, era todo raro, parecía que la tormenta estaba guarecida entre las nubes, y asomaban de vez en cuando, para darte un susto de muerte.
-Aquella noche me dí cuenta de que mi madre sí tenía miedo a algo,-A LAS TORMENTAS-y me recordó, que cuando ella era muy, muy, pequeña, la mandaban a la becera con las vacas-QUIZÁS TENDRÍA SÓLO 8 Ó 10 AÑOS-pobretina, les acorraló la tormenta a la niña y a las vacas, monte arriba, y lejos, lejos el pueblo.
-Ella no sabía donde refugiarse-LE HABÍAN DICHO SUS PAPÁS-debajo de los árboles-NUNCA-y si te mojas, es mejor, que el catarro se cura y las vacas ya sabrán donde tienen que ir cuando llegue la calma.
Te entiendo Libertad, por la experiencia nunca olvidada de una madre (Mi madre)
Aquí envío el pajarito de Yoli-MUY APROPIADA LA FOTO PARA EL MENSAJE EN CUESTIÓN-Después de la tormenta siempre vino la calma, y yo creo que aunque experiencias malas hemos tenido todos, las tormentas tienen algo especial, hay algo allá arriba, ó aquí abajo también, que nos cautiva-A MÍ PERSONALMENTE ME GUSTAN LAS TORMENTAS-Claro está en un lugar- A LA ABRIGADA-como se suele decir.
-No hace mucho, pensaba que a mi madre no le asustaba nada, nada, y cual fue mi sorpresa, que un día-HABÍA SALIDO DE COPICHUELAS CON UNOS COLEGAS (digo que fui yo, noooo mi madre), es que a veces me pierdo por las alturas, dicho sea de paso: A lo que iba, llego a casa, y le pregunto a la mama ¿Qué tal?, y me contesta, estoy temblando, no he podido prender ojo:
- ¿Y por qué mama?. Por la tormenta, me confesó que las tenía pánico-LA VERDAD ES QUE HACÍA UNA NOCHE DE PERROS-Sólo rayos por todas partes, truenos, era todo raro, parecía que la tormenta estaba guarecida entre las nubes, y asomaban de vez en cuando, para darte un susto de muerte.
-Aquella noche me dí cuenta de que mi madre sí tenía miedo a algo,-A LAS TORMENTAS-y me recordó, que cuando ella era muy, muy, pequeña, la mandaban a la becera con las vacas-QUIZÁS TENDRÍA SÓLO 8 Ó 10 AÑOS-pobretina, les acorraló la tormenta a la niña y a las vacas, monte arriba, y lejos, lejos el pueblo.
-Ella no sabía donde refugiarse-LE HABÍAN DICHO SUS PAPÁS-debajo de los árboles-NUNCA-y si te mojas, es mejor, que el catarro se cura y las vacas ya sabrán donde tienen que ir cuando llegue la calma.
Te entiendo Libertad, por la experiencia nunca olvidada de una madre (Mi madre)
Lo cierto es anamaría, que esta foto, tambien merece un aplauso poetico; pero como hablamos de tormenta, me permito reconocer que este fenomeno me atrae, sobre todo en la noche, y hasta me asomo justamente aquí a la ventana.
Si que tengo alguna experiencia desagradable de ellas, sin embargo, esa fuerza me atrae y puedo asegurar, que perdido un día en una tormenta de nieve, (no lejos del nacimiento del ebro, donde tuve hasta hace poco tiempo una casita) me atrapó entre dos luces, se hizo noche, y me encontré, al pié de la cordillera, atrapado bajo la tormenta en una llanura de nieve: sudaba sudor helado, me orieté y a la luz de los relámpagos, bi la línea elecrica, con nieve hasta la cintuta llegue a ella. Mis pies tocaron firme: era un puente y en su altura el viento había barrido la nieve. Al otro lado, a unos 500 metros estaba mi casa, llegué exhausto. Aquella noche, un conocido mío perdió su vida a solo unos metros de la ciudad de Reinosa.
hay otro par de experiencias, de las que tengo algo escrito, les enviaré algún día... hoy, una vez estudiada la foto y sus nubarrones... ¿que me inspiran estos? Los presentes que vivimos y nubarrones niños. Voy a ver que se me ofrece, a patir de los versos de esta mañana.
NUBARRONES...
Cuesta arriba, pecho adentro,
seguro crecen palabras;
seguro que un cielo negro
mata colores de un alba...
y que vendran a mi encuentro
mañanas ya muy lejanas:
-! Ah punzadas del recuerdo
de la memoria tristes alas!-
! Como emergen silencios
hoy en mi puma mojada!
¿Podré evitar los mil ruidos
y mantenerme sereno
mientras recorro caminos
de las cortezas del tiempo?
Me llama la luvia: juro
martener mis ojos secos
si la campañas de lluvia
me repican a lo lejos:
allí en los cielos oscuros,
niños y tirando a negros...
aunque barrunto, barrunto
lluvia empañando mis versos.
Y es que me llaman a voces
en caminos mil y secos.
y que campanas de lluvia
me repican a lo lejos
en mil lamentos que herían
mis pensamientos pequeños.
En mil lamentos del aire.
En mil lamentos del viento.
En lamento en los andenes
de un ayer y de sus miedos
! Ah mi mochila, que atroces
miedos goteaba entonces
cuando nubarrones negros:
-! Ah los gritos de la nieve
en el mundo y sus hielos!-
Aquel dolor me dolía
porque destrozaba sueños...
de allí en mi ancha Castilla,
aquellos años primeros.
Mis mas tiernas golondrinas
vi abandorar su alero
huyendo por las campiñas...
El mundo se me hizo viejo
cuando gritos de la ira,
y rosales pereciendo...
Juro vi la lluvia herida
chorreando desde el cielo.
Juro que lloré aquel día
y con dolor escribí versos.
libertad.
Si que tengo alguna experiencia desagradable de ellas, sin embargo, esa fuerza me atrae y puedo asegurar, que perdido un día en una tormenta de nieve, (no lejos del nacimiento del ebro, donde tuve hasta hace poco tiempo una casita) me atrapó entre dos luces, se hizo noche, y me encontré, al pié de la cordillera, atrapado bajo la tormenta en una llanura de nieve: sudaba sudor helado, me orieté y a la luz de los relámpagos, bi la línea elecrica, con nieve hasta la cintuta llegue a ella. Mis pies tocaron firme: era un puente y en su altura el viento había barrido la nieve. Al otro lado, a unos 500 metros estaba mi casa, llegué exhausto. Aquella noche, un conocido mío perdió su vida a solo unos metros de la ciudad de Reinosa.
hay otro par de experiencias, de las que tengo algo escrito, les enviaré algún día... hoy, una vez estudiada la foto y sus nubarrones... ¿que me inspiran estos? Los presentes que vivimos y nubarrones niños. Voy a ver que se me ofrece, a patir de los versos de esta mañana.
NUBARRONES...
Cuesta arriba, pecho adentro,
seguro crecen palabras;
seguro que un cielo negro
mata colores de un alba...
y que vendran a mi encuentro
mañanas ya muy lejanas:
-! Ah punzadas del recuerdo
de la memoria tristes alas!-
! Como emergen silencios
hoy en mi puma mojada!
¿Podré evitar los mil ruidos
y mantenerme sereno
mientras recorro caminos
de las cortezas del tiempo?
Me llama la luvia: juro
martener mis ojos secos
si la campañas de lluvia
me repican a lo lejos:
allí en los cielos oscuros,
niños y tirando a negros...
aunque barrunto, barrunto
lluvia empañando mis versos.
Y es que me llaman a voces
en caminos mil y secos.
y que campanas de lluvia
me repican a lo lejos
en mil lamentos que herían
mis pensamientos pequeños.
En mil lamentos del aire.
En mil lamentos del viento.
En lamento en los andenes
de un ayer y de sus miedos
! Ah mi mochila, que atroces
miedos goteaba entonces
cuando nubarrones negros:
-! Ah los gritos de la nieve
en el mundo y sus hielos!-
Aquel dolor me dolía
porque destrozaba sueños...
de allí en mi ancha Castilla,
aquellos años primeros.
Mis mas tiernas golondrinas
vi abandorar su alero
huyendo por las campiñas...
El mundo se me hizo viejo
cuando gritos de la ira,
y rosales pereciendo...
Juro vi la lluvia herida
chorreando desde el cielo.
Juro que lloré aquel día
y con dolor escribí versos.
libertad.