¿Verdad Yoli que es bello soñar? Preciosa historia.,...

IRIS, LA MENSAJERA DE LOS DIOSES
Original de Nieves Elena Morán

Cuando Iris sueña es como cuando el río suena, agua trae. En ese entonces, a los sueños de Iris todos le rehuían. Por las mañanas, no bien se levantaba, daba comienzo al relato de las imágenes nocturnas que elaboraba su mente trasnochada. Llevaba años, casi tantos como los que tenía de vida, practicando la misma rutina y en la casa ya nadie le prestaba atención.
Ella, rencorosa, era capaz de soñar el número ganador de la lotería de Navidad y en represalia a tanto desprecio, no decírselo a nadie. Justamente eso fue lo que ocurrió aquel año bisiesto cuando su familia perdió todo en una sigilosa crecida del río. Les llevó años recuperarse.
Iris observaba en silencio y cuando las malas rachas eran insuperables, lejos de despreciarla, prestaban atención a sus sueños. Para salir de pobres, decían. Ella no era tonta y solía cambiar sus sueños a propósito. Eran épocas en que decía lo que cada uno esperaba oír.
Últimamente, el agua estaba presente en sus noches agitadas. Algunas veces era agua calma y cristalina que corría por ríos y arroyos. Otras, la veía encabritada en anchos mares. Siempre agua en movimiento. Muchos años atrás el cura del pueblo le había asegurado que soñar con agua era un buen presagio, que era como el trascurrir de la vida, sólo eso.
Una noche, las aguas mansas se convirtieron en turbulentas. Iris se revolvió inquieta en su cama y su propio grito la despertó. Se levantó tambaleante y llegó a la cocina para asomarse a la ventana que daba al patio de tierra, todavía humedecida por el sereno. Vio que ya era de día. Lo adivinó, casi, porque el cielo parecía que estaba a punto de desplomarse sobre los techos de las humildes casas.

¿Verdad Yoli que es bello soñar? Preciosa historia., para una tarde primaveral como esta, en la que también amenaza tormenta.
Ciertamente es bello soñaar; a mi me gusta soñar, y lo e dicho otras veces.. ser una manera de abrazar bellas tristezas, espantando aves carroñeras.

"! Regresemos!" -me digo a veces, y me invito a ser muchacho tímido y me sonrío un poco burlón. Regresamos "le digo a ella, me repito muchacho y caminamos mano man en mano, por campos de avena, cebada o trigos.
Si que me embarga un poco de tristeza, cuando me dice el recuerdo:"Aquello que se fue ya no regresas"! Mientes!-Digo yo desde mi memoria. Y no quiero torturarme imaginándola con ls cabellos blacos, tal vez teñidos... Y regreso.
"Y regresamos" al idilio interrumpido:! maldita tormenta! grito, y regresamos, por el sendero lleno de charcos, en silencio, tal vez ella pensado en sus miedos. y su vestido manchado de barro.! Maldita tormenta!-Grito. Calla ella.
Y en la morera (hoy muy crecida) nos despedimos: unas lágrimas le ruedan de sus mejillas y mojan mi cara. El cielo sigue oscuro. la tomenta, avisa de sus rayos y truenos a lo lejos. ¿De verdad... de verdad te vas mañana? No acertaba ha hablar, y estalló en llanto.

Y yo que quise decirle, a la luz de los silencios, que otros día miraría sus ojos, y que los besaría hasta detras de sus parpados, que no importaba los besos interrumpidos. Que mañana... Que mañana volaríamos, por donde lo hacen las ágilas, mas alla de las nubes, y nos detendremos en una grade y hermosamente blanca en cuyas orillas crecen flores...
Y yo que quise decirle. y no le dije nada.
Y yo que mencioné mañana y no hubo mañana.
Y yo que la imagino oy una bella viejecita, en la aquella mujer casi niña que lloraba!
libertad.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Verdad querido Libertad y no sólo es bello si no necesario, a veces imaginar que las cosas son distintas a como son en la realidad te ayuda a continuar, así pues soñemos, que como dice un amigo soñar no cuesta
Un abrazo amigo soñador