Y ya en el puerto de Tarna por fin la nieve a orilla...

Y ya en el puerto de Tarna por fin la nieve a orilla de la carretera, aquí mi Santo por saltar un regato se dió una morrada y se retorció un píe, por la noche lo tenía hinchado y no podía caminar, así que al día siguiente hubo que ir a la fisioterapeuta de La Robla