El clima de la comarca es oceánico-continental, y es...

Foto: lago de Baña

En la comarca se sitúa la frontera entre dos cuencas hidrográficas, la del Miño (Cabrera-Sil) y del Duero (Eria). Los regímenes fluviales son pluvionivales, marcados con máximos en invierno (máximo de precipitaciones) y primavera (deshielo), y a un mínimo marcado en verano.

La Cabrera cuenta con una importante cantidad de lagunas y lagos de origen glaciar. Entre ellos los más destacados son el lago de La Baña y el lago de Truchillas, catalogados como espacios naturales protegidos por la Junta de Castilla y León.

El clima de la comarca es oceánico-continental, y es influenciado por la proximidad relativa del Atlántico y la baja latitud que proporciona rasgos mediterráneos. El clima se caracteriza por
inviernos fríos, con heladas e importantes precipitaciones de agua y nieve.
veranos cálidos, sobrepasando los 21 °C de media y los 30 de temperatura máxima, y con una fuerte sequía.

La altitud, que oscila entre 376 metros en el Puente de Domingo Flórez hasta más de 1200 en Forna, trae grand diversidad térmica. En las zonas bajas, las medias son de 12,7 °C (enero 5°, agosto 21°: cuatro a cinco meses de sequía, con julio y agosto totalizando menos de 20 mm mensuales). Las precipitaciones van comprendidas entre 800 y 1000 mm/año, y el sol luce unas 2.100 h/año. La altitud provoca una bajada de las temperaturas y un aumento de las precipitaciones.