Bueno, y como mañana tenemos movida, ya es hora de recogida. Así pues nos retiraremos también a nuestros aposentos a descansar, (nada que ver con el del emperador, pero cuando uno no ha nacido con sangre real... ya se sabe... hay que conformarse con un dormitorio plebeyo) (A Dios gracias)...
¡Dulces sueños!
¡Dulces sueños!