Y ahora, cumpliendo con lo prometido, vamos a narrar, con palabras de su presentadora Eva Testa, la presentación del libro de José María Gómez de la Torre (Santo de Yoli y tío mío) que, el pasado día 30, celebramos en el Palacio de Gaviria de León.
Eva testa, después de una breve y coloquial introducción, dice así:
Prologar un libro es difícil, porque las palabras elegidas para apoyarlo o describirlo quedan impresas para siempre en el mismo; has de conocer perfectamente al autor para interpretar correctamente el sentido de su texto, su historia, su argumento narrativo.... y convencer al lector anónimo de que no va a ser en vano su lectura. Además si el libro es prologado por José María Merino, mi tarea como presentadora del libro de José María Gómez, "En la eternidad no hay relojes", es doblemente difícil porque me enfrento a dos escritores de talla reconocida y celebrada, pudiendo quedar mermado el merecimiento de su calidad en la descripción que pueda dar de él con mis discretas palabras.
Eva testa, después de una breve y coloquial introducción, dice así:
Prologar un libro es difícil, porque las palabras elegidas para apoyarlo o describirlo quedan impresas para siempre en el mismo; has de conocer perfectamente al autor para interpretar correctamente el sentido de su texto, su historia, su argumento narrativo.... y convencer al lector anónimo de que no va a ser en vano su lectura. Además si el libro es prologado por José María Merino, mi tarea como presentadora del libro de José María Gómez, "En la eternidad no hay relojes", es doblemente difícil porque me enfrento a dos escritores de talla reconocida y celebrada, pudiendo quedar mermado el merecimiento de su calidad en la descripción que pueda dar de él con mis discretas palabras.