¡Buenas tardes a tod@s! Os dejo estos versos. Espero os gusten
Un fuerte abrazo y hasta más tarde.
Fulgores de nuestra tierra,
despertar de la mañana,
pues llega la primavera
la cigarra se levanta.
Estuvo todo el invierno
recogida en su morada,
saldrá con su chicharreo
al suave venir del alba,
a par que se abren las flores
para celebrarlo canta.
El rocío va dejando
como gotas de esmeralda
sobre aquellas hojas verdes,
y gotas que son diamantes
posadas, en las rosas blancas,
en un clamor de alegría,
en un brillo de esperanza.
Las hormigas aún desfilan
en su labor sin parada,
y también los caracoles
dejando el surco que marca
los restos de sabia vida
que mantiene su coraza.
Rayos de sol sobre el pueblo
se expanden por la solana,
mientras que en el abeseo
la sombra extiende sus alas.
Un nido de pajarillos
pían con fuerza y con ganas,
reclamando de su madre
alimento que les traiga.
Las cigüeñas en las Iglesias
se alzan sobre largas patas,
observando a sus poyuelos
bajo su altura garbada.
Y si miras hacia el monte
un ave rapaz se halla,
al acecho de una presa
que por su camino pasa.
En el campo el labrador
comienza ya la jornada,
y el pastor con su rebaño
de camino a la collada.
Esto poquito que os cuento
También en mi pueblo pasa
Canales-La Magdalena
Este pueblo de montaña.
Coral
Un fuerte abrazo y hasta más tarde.
Fulgores de nuestra tierra,
despertar de la mañana,
pues llega la primavera
la cigarra se levanta.
Estuvo todo el invierno
recogida en su morada,
saldrá con su chicharreo
al suave venir del alba,
a par que se abren las flores
para celebrarlo canta.
El rocío va dejando
como gotas de esmeralda
sobre aquellas hojas verdes,
y gotas que son diamantes
posadas, en las rosas blancas,
en un clamor de alegría,
en un brillo de esperanza.
Las hormigas aún desfilan
en su labor sin parada,
y también los caracoles
dejando el surco que marca
los restos de sabia vida
que mantiene su coraza.
Rayos de sol sobre el pueblo
se expanden por la solana,
mientras que en el abeseo
la sombra extiende sus alas.
Un nido de pajarillos
pían con fuerza y con ganas,
reclamando de su madre
alimento que les traiga.
Las cigüeñas en las Iglesias
se alzan sobre largas patas,
observando a sus poyuelos
bajo su altura garbada.
Y si miras hacia el monte
un ave rapaz se halla,
al acecho de una presa
que por su camino pasa.
En el campo el labrador
comienza ya la jornada,
y el pastor con su rebaño
de camino a la collada.
Esto poquito que os cuento
También en mi pueblo pasa
Canales-La Magdalena
Este pueblo de montaña.
Coral