Buenos días,! es jueves, el dia de la José Luis.
LA ESPUMA DE LOS DÍAS
A los toros conla dama de alba
23/06/2011 JOSÉ L. SUÁREZ ROCA
E stábamos la otra tarde en el Café, celebrando la entrada del verano y hablando sobre los ritos que se practicaban en la noche de San Juan, cuando entró el Peta del barrio tarareando Suspiros de España. Y traía en una mano unas hojas de periódico y en la otra su flauta de madera. «Me sé ya de memoria las cien medidas... que ha presentado el alcalde de León... para devolverle a la ciudad... en cien días, ¡en cien!... la imagen que se merece... O sea que, si me pagáis unas cervezas, os las recito cagando melodías.» ¡La Virgen! Ya empezamos. No son horas, Peta, dinos qué hogueras piensas saltar la noche de San Juan... Y comenzó su letanía.
«Una: Promover la instalación de una escultura homenaje al Pendón Leonés». Y a continuación trenzó en la flauta las primeras notas del Clavelitos. ¿Pero se puede saber quién es ese Pendón Leonés, Peta? « ¡Cabrones sois! Otra: ¡Actuación contra los grafitis y pintadas indiscriminadas!» Y ya emprendía muy feliz el Si tú me dices ven, cuando se le cayó la flauta y lanzó entonces una blasfemia contra el póster de Marylin colgado en la pared... ¡Será contra los grafiteros, Peta! «Aquí pone grafitis, joder, no me calentéis. Otra: Puesta en marcha de un plan para facilitar la instalación de ascensores en las viviendas antiguas». Y tras beberse media jarra de cerveza y coger todo el aire que cabía en sus pulmones, enlazó con mucho brío los primeros pentagramas de La Bamba, y todos nos entonamos durante un buen rato al son de «Para subir al cielo, para subir al cielo se necesita una escalera grande...» Hasta que nos mandó parar con aspavientos de director de orquesta. «Otra: Potenciación de la Policía de barrio y refuerzo de la presencia policial en toda la ciudad». Y se echó a reír, porque sabía bien que ni de coña acertaríamos la canción que iba a ejecutar, y soplando como un profesional enfiló la muletilla famosa del Pacto entre caballeros de Sabina, «Mucha, mucha policía, mucha, mucha policía...» ¡Hostia, Peta! ¿Cuándo aprendiste esa? « ¡Quietos, que va otra: Recuperación del templete de música del paseo de la Condesa!» Y cuando ya esperábamos ansiosos otra maravilla del flautista, de pronto empezó a cantar «A coger el trébole y el trébole y el trébole, y a buscar el trébole la noche de San Juan...»
Y por ahí seguimos, con las manos y las jarras de cerveza en alto, hasta que el Peta se cansó: «Si este señor implanta esas cien medidas en cien días, me quito los pendientes y peregrino hasta La Mancha a echarle los tejos a la Cospedal». Y envolviendo su flauta en la hoja de periódico se nos fue diciendo: «La noche de san Juan no contéis conmigo. Al día siguiente me voy a los toros con la dama del alba».
LA ESPUMA DE LOS DÍAS
A los toros conla dama de alba
23/06/2011 JOSÉ L. SUÁREZ ROCA
E stábamos la otra tarde en el Café, celebrando la entrada del verano y hablando sobre los ritos que se practicaban en la noche de San Juan, cuando entró el Peta del barrio tarareando Suspiros de España. Y traía en una mano unas hojas de periódico y en la otra su flauta de madera. «Me sé ya de memoria las cien medidas... que ha presentado el alcalde de León... para devolverle a la ciudad... en cien días, ¡en cien!... la imagen que se merece... O sea que, si me pagáis unas cervezas, os las recito cagando melodías.» ¡La Virgen! Ya empezamos. No son horas, Peta, dinos qué hogueras piensas saltar la noche de San Juan... Y comenzó su letanía.
«Una: Promover la instalación de una escultura homenaje al Pendón Leonés». Y a continuación trenzó en la flauta las primeras notas del Clavelitos. ¿Pero se puede saber quién es ese Pendón Leonés, Peta? « ¡Cabrones sois! Otra: ¡Actuación contra los grafitis y pintadas indiscriminadas!» Y ya emprendía muy feliz el Si tú me dices ven, cuando se le cayó la flauta y lanzó entonces una blasfemia contra el póster de Marylin colgado en la pared... ¡Será contra los grafiteros, Peta! «Aquí pone grafitis, joder, no me calentéis. Otra: Puesta en marcha de un plan para facilitar la instalación de ascensores en las viviendas antiguas». Y tras beberse media jarra de cerveza y coger todo el aire que cabía en sus pulmones, enlazó con mucho brío los primeros pentagramas de La Bamba, y todos nos entonamos durante un buen rato al son de «Para subir al cielo, para subir al cielo se necesita una escalera grande...» Hasta que nos mandó parar con aspavientos de director de orquesta. «Otra: Potenciación de la Policía de barrio y refuerzo de la presencia policial en toda la ciudad». Y se echó a reír, porque sabía bien que ni de coña acertaríamos la canción que iba a ejecutar, y soplando como un profesional enfiló la muletilla famosa del Pacto entre caballeros de Sabina, «Mucha, mucha policía, mucha, mucha policía...» ¡Hostia, Peta! ¿Cuándo aprendiste esa? « ¡Quietos, que va otra: Recuperación del templete de música del paseo de la Condesa!» Y cuando ya esperábamos ansiosos otra maravilla del flautista, de pronto empezó a cantar «A coger el trébole y el trébole y el trébole, y a buscar el trébole la noche de San Juan...»
Y por ahí seguimos, con las manos y las jarras de cerveza en alto, hasta que el Peta se cansó: «Si este señor implanta esas cien medidas en cien días, me quito los pendientes y peregrino hasta La Mancha a echarle los tejos a la Cospedal». Y envolviendo su flauta en la hoja de periódico se nos fue diciendo: «La noche de san Juan no contéis conmigo. Al día siguiente me voy a los toros con la dama del alba».