Pues si que está bien eso del vino sin alcohol, para quienes nos gusta el buen vino, pero no podemos con el alcohol. Sería importante lograr una equivalencia al paladar entre el "con" y el "sin", una buena cena con un buen vino es el complemento perfecto, y si encima, no se sube a la cabeza la convierte en la cena perfecta.