LA ALCALDESA LLORA EN ANTENA.
El llanto selectivo de Colau.
Álvaro Martínez.
Actualizado:
18/06/2019 23:41h.
Emocionada al pensar en el sufrimiento de sus hijos, la alcaldesa de Barcelona se echó ayer a llorar en antena al recordar los insultos que le han proferido los separatistas por no pactar con ERC en el ayuntamiento, regüeldos de tan alto voltaje y vileza que no merecen ser reproducidos en estas páginas. Colau ha definido como «insoportable» la presión que ha tenido que aguantar estos días hasta tomar la segunda vara, cuando su nombre era voceado por las calles de Barcelona con un feo denuesto al lado. «Traidora» y «botiflera» son los rebuznos más suaves que ha escuchado en «estos días terribles». Lejanos, pues, en su memoria los tiempos en los que ella protagonizaba escraches, insultando a los poderosos, a los bancos, a los políticos «que condenan a la miseria a la gente», a todo lo que se movía y muchas veces con nombre y apellido. Hasta se hizo un traje de superheroína justiciera para recorrer los tumultos frente a las oficinas bancarias y los pisos a punto de desahucio.
Selectiva en su pena, Colau no condenó las agresiones a militantes de Vox en época prelectoral, si acaso su único lamento fue que «esos rancios consiguieron lo que buscaban». Es decir, que te abre la cabeza un salvaje con lazo y la culpa es tuya por «provocar». Se lo buscaron ellos, vino a decir.
Quizá lo que no entiende Colau, y el motivo final de su llanto, es que considera injusto que los «indepes» la acosen. A ella, que se ha prodigado en gestos de cariño con los golpistas presos (el último, volver a colgar la birria del lazo en el ayuntamiento); a ella, que ha intentado menospreciar al Rey de España, negándole el saludo; a ella, que mandó al brioso Gerardo Pisarello a quitar la bandera de España del balcón consistorial, como si fuera un trapejo sucio; a ella, que se ha hartado de decir (como Guardiola, pero sin chándal) que «es una vergüenza que en España haya presos políticos»; a ella, que ha insultado a la Policía poniéndole hasta una placa « ¡por franquista!»; a ella, que abrió instalaciones municipales para que albergaran las urnas ilegales del 1-O...
A Colau no la manchan esos estúpidos insultos cimarrones del CDR de guardia frente al ayuntamiento. A esta Inmaculada solo le tizna, desde el punto de vista político, su sectarismo irreductible y el desprecio sostenido a todo el que no opina como ella. Si hasta dedicó un mohín de asco a los votos de Valls que la hicieron alcaldesa. Y eso también da para echar unas cuantas lágrimas.
Álvaro Martínez.
Redactor jefe.
R-1.-
El llanto selectivo de Colau.
Álvaro Martínez.
Actualizado:
18/06/2019 23:41h.
Emocionada al pensar en el sufrimiento de sus hijos, la alcaldesa de Barcelona se echó ayer a llorar en antena al recordar los insultos que le han proferido los separatistas por no pactar con ERC en el ayuntamiento, regüeldos de tan alto voltaje y vileza que no merecen ser reproducidos en estas páginas. Colau ha definido como «insoportable» la presión que ha tenido que aguantar estos días hasta tomar la segunda vara, cuando su nombre era voceado por las calles de Barcelona con un feo denuesto al lado. «Traidora» y «botiflera» son los rebuznos más suaves que ha escuchado en «estos días terribles». Lejanos, pues, en su memoria los tiempos en los que ella protagonizaba escraches, insultando a los poderosos, a los bancos, a los políticos «que condenan a la miseria a la gente», a todo lo que se movía y muchas veces con nombre y apellido. Hasta se hizo un traje de superheroína justiciera para recorrer los tumultos frente a las oficinas bancarias y los pisos a punto de desahucio.
Selectiva en su pena, Colau no condenó las agresiones a militantes de Vox en época prelectoral, si acaso su único lamento fue que «esos rancios consiguieron lo que buscaban». Es decir, que te abre la cabeza un salvaje con lazo y la culpa es tuya por «provocar». Se lo buscaron ellos, vino a decir.
Quizá lo que no entiende Colau, y el motivo final de su llanto, es que considera injusto que los «indepes» la acosen. A ella, que se ha prodigado en gestos de cariño con los golpistas presos (el último, volver a colgar la birria del lazo en el ayuntamiento); a ella, que ha intentado menospreciar al Rey de España, negándole el saludo; a ella, que mandó al brioso Gerardo Pisarello a quitar la bandera de España del balcón consistorial, como si fuera un trapejo sucio; a ella, que se ha hartado de decir (como Guardiola, pero sin chándal) que «es una vergüenza que en España haya presos políticos»; a ella, que ha insultado a la Policía poniéndole hasta una placa « ¡por franquista!»; a ella, que abrió instalaciones municipales para que albergaran las urnas ilegales del 1-O...
A Colau no la manchan esos estúpidos insultos cimarrones del CDR de guardia frente al ayuntamiento. A esta Inmaculada solo le tizna, desde el punto de vista político, su sectarismo irreductible y el desprecio sostenido a todo el que no opina como ella. Si hasta dedicó un mohín de asco a los votos de Valls que la hicieron alcaldesa. Y eso también da para echar unas cuantas lágrimas.
Álvaro Martínez.
Redactor jefe.
R-1.-
Qué mala gente hay en la derecha! No?
Y en la izquierda también
solamente un LIBERAL
puede decir: "quien es quien"
! Con el debido respeto y consideración!
solamente un LIBERAL
puede decir: "quien es quien"
! Con el debido respeto y consideración!
Yo no veo artículos así de la izquierda nunca, demuestramelo, busca, busca.
De la derecha amontonados. No tienes más que leer los que nos trae Triana.
De la derecha amontonados. No tienes más que leer los que nos trae Triana.
La culpa de los socialistas, Triana siempre trae lo mejor de lo mejor, estudia y sácate una tesis como la de tu presi.
Mira otro ser que se está haciendo siendo despreciable.
Sergio L. Merillas
Madrid - Madrid - Martes, 18/06/2019 - 23:10
Nuevo episodio en la cruzada de Eduardo Inda contra 'Todo es mentira'. El medio digital que dirige el periodista ha decidido atacar ahora a Marta Flich, copresentadora del formato vespertino de Cuatro, poniendo en duda su trayectoria profesional y reduciéndola a la relación que mantuvo en el pasado con uno de los nietos de Franco. Una información sobre la vida personal de la economista que ella misma ha confirmado con naturalidad.
"Ha llegado el momento de Inda, que hoy esta chisposo. Después de desmentirle la 'trola' de la semana pasada, de que yo le había puesto un detective privado, ahora deja de meterse conmigo y va a por Marta Flich", señaló Risto Mejide durante la tarde de ayer en el programa que lidera. A continuación, mostró en pantalla el artículo de OKDiario y la aludida sacó de dudas a los espectadores: "Bueno, es verdad. Hace catorce años".
Aunque Flich mantuvo la compostura, Montse Suárez mostró su indignación por el machismo que desprende el artículo, que trata de ridiculizar a la economista destapando detalles de su vida privada y cuestionando su valía profesional. "Lo repugnante es que digan que tus méritos son gracias a esa relación sentimental. Es de vergüenza, ¡qué machismo!", lamentó la abogada y colaboradora de 'Todo es mentira'.
"Me he hecho demócrata como venganza", ironizó Flich en la mesa de 'Todo es mentira', donde prefirió tomarse con humor este ataque sin darle mayor importancia: "Se retratan ellos solos, no merece la pena". "Lo siento, es puto machismo, por ahí no paso porque a mí también me ha pasado, estoy hasta las narices", sentenció Suárez. "Se ha abierto la veda", avisó Risto por su parte.
La derecha està llena, es una vergüenza que haya este tipo de periodismo
Sergio L. Merillas
Madrid - Madrid - Martes, 18/06/2019 - 23:10
Nuevo episodio en la cruzada de Eduardo Inda contra 'Todo es mentira'. El medio digital que dirige el periodista ha decidido atacar ahora a Marta Flich, copresentadora del formato vespertino de Cuatro, poniendo en duda su trayectoria profesional y reduciéndola a la relación que mantuvo en el pasado con uno de los nietos de Franco. Una información sobre la vida personal de la economista que ella misma ha confirmado con naturalidad.
"Ha llegado el momento de Inda, que hoy esta chisposo. Después de desmentirle la 'trola' de la semana pasada, de que yo le había puesto un detective privado, ahora deja de meterse conmigo y va a por Marta Flich", señaló Risto Mejide durante la tarde de ayer en el programa que lidera. A continuación, mostró en pantalla el artículo de OKDiario y la aludida sacó de dudas a los espectadores: "Bueno, es verdad. Hace catorce años".
Aunque Flich mantuvo la compostura, Montse Suárez mostró su indignación por el machismo que desprende el artículo, que trata de ridiculizar a la economista destapando detalles de su vida privada y cuestionando su valía profesional. "Lo repugnante es que digan que tus méritos son gracias a esa relación sentimental. Es de vergüenza, ¡qué machismo!", lamentó la abogada y colaboradora de 'Todo es mentira'.
"Me he hecho demócrata como venganza", ironizó Flich en la mesa de 'Todo es mentira', donde prefirió tomarse con humor este ataque sin darle mayor importancia: "Se retratan ellos solos, no merece la pena". "Lo siento, es puto machismo, por ahí no paso porque a mí también me ha pasado, estoy hasta las narices", sentenció Suárez. "Se ha abierto la veda", avisó Risto por su parte.
La derecha està llena, es una vergüenza que haya este tipo de periodismo