Buenos días
amigas:
¿Qué tal? ¡Qué envidia de gotas de agua en medio de tanta sequía. Lo mismo me ha pasado a mi, que quería
leer un
libro y no estaba disponible. Así que he mirado entre mis volúmenes, y tachin, tachan, "Cumbres Borrascosas", que no lo había leído todavía, y estaba entre los últimos
libros que mi hermano pequeño me dio porque no le cabían en casa.
Y en las casas de los pueblos, caben; y mas, en la mía, tratándose de libros, que siempre tuvimos una sequía histórica en mi
familia.
Me cuesta encontrarle el punto por el poco tiempo de estos días pero leyendo y leyendo, acabaré por encontrarlo. Es que es una novela romántica y han pasado dos largos siglos desde entonces.
Mi padre ya se ha ido a los
madriles. Le gusta
Madrid por muchas cosas, entre otras, porque sigue viviendo en su propia casa, porque tiene un bono de autobuses que todavía puede usar para ir a su centro de día, porque en su casa hay ascensor, y porque su casa es suya propia, que bien se la ha ganado con el sudor de su frente.
Y porque allí están mis hermanos que le quieren. Pero él los quiere mas, como suele pasar con los padres, que por mucho que los hijos quieran, el amor de los padres es siempre mayor. Será por la edad.
No es mi gato, ni mi balancín, que no tengo, pero ya ves qué a gusto se le ve a mi padre, que se encontró estupendamente acomodado ahí, en la casa de unos
amigos.
Besos a todas, especialmente a Ludueña y hasta otro rato