Lú: ...

Lú:
me gusta este apartado porque puede servir para despedirse, para poner en claro cosas que a ciertas personas no se puede decir.
Yo aquí lo que quiero decir es que no voy a entrar al trapo con nadie para llevarme mal rato. Cuando veo que es imposible hablar con alguien lo dejo y en paz.
Decir que el insulto no lleva a ninguna parte, y decir también que decir lo que piensas y la verdad que crees no es un insulto. Si algo es rojo no puedes decir que es verde.
Si por ejemplo viese que mucha gente está en mi contra no por lo que digo, sino por quien soy o por lo que me califiquen, dejaría de opinar automáticamente.
Lo que se dice puede cambiar si ves que estás en un error, quien eres no lo puedes cambiar y menos si te ponen una identidad errónea.
Por ejemplo:
Eso que dices no me parece bien por tal o cual cosa. Perfecto
Y no es lo mismo que decir: Eres tal o cual cosa.
A un hijo: Tu conducta no me gusta, no lees, no atiendes; y no es lo mismo que decirle, eres egoísta, estúpido e inculto.
No es lo mismo fijarse en lo que se piensa que en lo que se es o das por supuesto que alguien sea, aunque no sea cierto de ninguna de las maneras.
Las ideas se pueden rebatir pero tampoco me parece bien que en una conversación, en la que no te hayas metido con alguien en especial te contesten de forma ofensiva. Si es opinar, lo acepto; si es insultarte y menospreciarte, no.
Si yo hablo con alguien, quizás ese alguien tenga qué decirme, por qué de su postura, etc... Pero hay gente que va a por quien le cae mal de antemano.
Un saludo.