Escribir me da mucha energía también, y decir lo que piensas es muy terapeútico. Es bueno que no se te quede nada en el tintero. Fortalece mucho no quedarse con lo que piensas para ti y comunicarlo. Además sabes que tienes que hacer algo, pues a por ello. Se aprovecha el tiempo. Mientras que el agua hierve en la cocina yo aquí divinamente charlando pero en cuanto se acabe, me doy a dormir tomando eso si, mi manzanilla con tila que me va fenomenal para descansar, y mañana levantarme de nuevo con ganas y ánimo de hacer muchas cosas.
¿Qué tal por ahí, os llueve?
Aquí solo hace frío. Decía Carlos que por el Bierzo llovía. ¡Qué suerte!
¿Qué tal por ahí, os llueve?
Aquí solo hace frío. Decía Carlos que por el Bierzo llovía. ¡Qué suerte!