MADRID Y MI ESTACIÓN DE INVIERNO...

MADRID Y MI ESTACIÓN DE INVIERNO

Siempre tuve claro que Madrid, al menos para mi, era una estación de invierno cuando el invierno llegaba a mi tierra. Tres meses y a volver en febrero o marzo. Una ciudad de paso, y me alegro muchísimo que esté situada a 190 kilómetros de mi pueblo. Mejor la ciudad cuanto mas lejos, porque menos daño hace al entorno. Y lo sé no por Madrid, sino por Burgos. Que tengas una ciudad tan cerca, lo único que repercute en el medio es para arrasar con todo lo bueno aguas abajo. Fuentes, ríos, aguas subterráneas y naturaleza perdida para siempre.
En realidad una ciudad es algo inhumano pero el ritmo natural de la ciudad te impide verlo y lo ves cuando tienes la oportunidad de salir de ahí y ver que la vida en otros lugares es otra cosa.
Si no hubiera vivido en un medio natural como el del Alto Tajo jamás hubiera notado la contaminación que la sentí el día que puse los pies en donde vivo. Y eso que Burgos es relativamente pequeña pero creo que si ha perjudicado al entorno ha sido porque nunca lo tuvo en cuenta. Y ya acaba y vámonos si los encargados de los proyectos eran los madrileños de SUFISA Y COMPAÑIA. Devastador.