Hola de nuevo: ...

Hola de nuevo:
por si a la noche no me paso por aquí y antes de irme a dar una super vuelta, os voy a decir que efectivamente, la niebla era foránea. En el exterior, en la subida a Villagonzalo Pedernales, no había niebla. Cosa del clima de Tardajos. Pasa muchas veces. Tras un tiempecito muy bueno, ahora está de cambio para frío y ventoso. Cosas del clima.
Soy una enamorada de la vida y de los libros, en especial. Cuando no sabía hacer tal o cual plato, lo leía; cuando quería saber qué les pasaba a mis hijos a determinada edad, lo leía. Y siempre así porque en mis pueblos del alto Tajo me enseñaron a leer, y a apasionarme con la lectura. Y cuando fui a Madrid, seguí leyendo hasta en los ratos muertos del metro. Porque por aquel entonces uno o una todavía se podía despreocupar y tomar el metro como una sala de lectura. Y hoy, en determinadas líneas pasará lo mismo.
Aquí donde vivo parece que está muy mal visto leer e interesarse por lo que sucede, pero yo paso de eso y sigo leyendo e interesándome por lo que sucede. Hay mas gente como yo, muchos mas, pero no se hacen notar porque tienen otras preocupaciones. Y yo tengo todo el tiempo del mundo para seguir aprendiendo de los buenos escritores.
Hoy me he encontrado en un kiosko de un supermercado a muchos clásicos a precio de saldo. Me agacho a mirar y resulta que a Luis de Góngora, en quien se inspiró la Generación del 27. Pues a por él, que además no había nadie interesándose, ni por este autor ni por otros. Y ya lo vi en el verano pero hoy me lo he traído a casa. Allí he dejado tirado a Lope de Vega para otra ocasión, y a Quevedo. Cosa curiosa que en el separador que contenía mi libro, una cita y
por no extenderme me voy al tema proverbios y allí os la dejo.
Un saludo doble