EN BUSCA DE LA MUÑECA OLVIDADA
Acabábamos de llegar del pinar. ¡Qué cansada!
- Pero tú, querida, no tienes culpa de nada. ¡Pobre, qué olvidada te tenía!. Vamos a dar una vuelta al jardín. A ver si nos encontramos con Kai, que se fue enfadado por la rosa, tan orgullosa, que se atrevió a herirle con una espina. Total, se enfadaron, y ya ni ella quiere saber nada, ni él tampoco.
La rosa habita en el jardín de nuestra amiga Mila. Lleno de flores de todos los colores donde reina la rosa. Ademas ... (ver texto completo)
Acabábamos de llegar del pinar. ¡Qué cansada!
- Pero tú, querida, no tienes culpa de nada. ¡Pobre, qué olvidada te tenía!. Vamos a dar una vuelta al jardín. A ver si nos encontramos con Kai, que se fue enfadado por la rosa, tan orgullosa, que se atrevió a herirle con una espina. Total, se enfadaron, y ya ni ella quiere saber nada, ni él tampoco.
La rosa habita en el jardín de nuestra amiga Mila. Lleno de flores de todos los colores donde reina la rosa. Ademas ... (ver texto completo)