Entre todos lo haremos posible, si nos ponemos en marcha, Burgos

Entre todos lo haremos posible, si nos ponemos en marcha.

¡Y lo único que tenemos que hacer es cenar!

Es una locura de mundo este que tenemos. Que seamos tan afortunados y no lo sepamos siquiera.

¡Y es tan difícil ponerse en la piel del que nada tiene!

¿Qué sería de nosotros si por una vez, en vez de una casa, viviéramos en una haima, si en vez de tener un techo, sólo viéramos estrellas, y frío. Calor por el día, acompañados de moscas pegajosas en busca de la poca sangre que tendríamos porque la comida sería tan escasa... que a duras penas tendríamos sangre.
Las enfermedades acosándonos a cada momento. Ver morir a los niños por falta de comida, alimentos, cuidados. Morirnos nosotros mismos.
Sin televisión, sin móbiles, sin teléfono, ordenador, lápices de colores, libros, cuentos, cuadernos.... sin sillas, mesas, ventanas, puertas...

Una locura, si de pronto cambiase nuestra vida y todo quedase reducido a arena del desierto, viento azotándonos por todas partes, como si el mundo se hubiera caído sobre nosotros.

Y eso es real y está pasando ahora mismo, sin que los magnates hagan nada para remediarlo pues su único afán es ir por el mundo hundiendo mercados, aplastándolos con sus gigantescos pies, y preparando sus entretenimientos en los lugares que más les plazca para perder el dinero que tanta falta le hace al mundo. Mientras unos se mueren, ellos devoran los recursos de todos en su propio bienestar. Aniquilan valores, y dejan a las personas sin recursos. Son los nuevo dioses pobladores de la pobre Tierra, que lo debe de estar pasando mal sabiendo que no puede alimentar a todos.

¡Y si a eso le llaman bienestar, que venga Dios y lo vea!