SI NOS PROHÍBEN SOÑAR DEJAREMOS DE SER
HOMBRES
Esta entrevista que le hacían a un poeta de
Burgos ayer me gustó mucho. El título es la frase que él pregona. Si os interesa
leer el artículo está en Diario de Burgos. De todo ello, entresaco esta pregunta y la respuesta que da el poeta.
Le pregunta el periodista:
"- ¿Aprenderemos alguna vez a no tenerle miedo a la soledad, a la vejez y al silencio?
-Los que no tienen vida interior y viven siempre hacia fuera tendrán miedo de sí mismos y, por lo tanto, del silencio, pero quienes buscan encontrar el fondo de la sociedad y del universo estarán encantados, porque en la meditación encontrarán su raíz. "
Creo que me a mi me ha pasado: no tengo miedo al silencio. Es que no hay silencio. Las máquinas, aún apagadas, muchas de ellas emiten ruidos. La naturaleza es sonido. Cuando estamos solos, estamos habitados por nosotros mismos y hay cosas que hacemos que con gente nunca haríamos.
Ayer me fijé en unas gotas de agua que rezumaban de ramas podadas. Y me fui a ver las ramas de los árboles. Si hubiera ido con alguien, no lo habría visto. Los árboles llenos de brotes y las flores de los almendros empezando a despuntar en las ramas altas.
Fue en Rabé, claro, pero porque elegí ese camino ayer. Podría haber sido otro pero...