Buenas noches Enrique:
me parto de la risa porque algunos de por aquí bien saben qué desagradecidos han sido. Es como un mensaje en clave.
Esta señora murió hace muchos años, pero en su testamento legó sus pertenencias a su pueblo, para que lo administrasen para remediar la pobreza, que se ve que en su época existió. Al igual que ella, otros también donaban sus propiedades. Solo que aquí, casi todo ha caído en saco roto. Y porque, a fuerza de insistir y esperar, al final, hemos recuperado parte de los bienes. Es una historia muy larga, y otra vez lo contaré.
Es una fundación o patronato, que no es demasiado importante, pero si lo suficiente para ser cuidada y tenida en cuanta. Alguna misa tendríamos que decirle a esta señora pues era muy piadosa y además lo encomendó al morir.
Está regida por cargos públicos de la localidad: cura párroco, alcalde y juez de paz; porque así lo dispuso en el testamento. Siempre hubo quien tuvo riquezas y pensó en los demás.
Una de sus propiedades se acondicionó para parque público desde la
primavera de 1999 hasta hoy en día.
Lo de casino es una broma que me ha hecho reír, y ni por esas le hubieran hecho un monumento aquí. Lo sé de sobra, pues antes del parque se dedicó a
juego de bolos - y acabó en un deplorable estado de abandono.
Un saludo cordial y te dejo con un muro florido - esta vez ciruelos.