El
Camino de Santiago es luchador, no sé si porque ya nos vimos en el pasado defendiendo de todo: naturaleza, cultura, sentimientos, historia. Y lo bueno es que no compromete defender honestamente tus ideales.
La naturaleza me da día a día motivos para su defensa.
Te levantas cada mañana con nuevas flores. Vas a otros sitios, y ves flores que despiertan después...
Ya casi se han pasado las lilas de mi jardín pero ahora renacen las rosas. Una, dije un día, y no, hay muchas más que se esperan unas a otras. Es increíble todo lo que nos aporta el
medio ambiente para que lo dejemos de lado, o lo perdamos sin hacer nada por él. No estoy dispuesta a ello.