Quisimos entrar en el museo, como en ediciones anteriores, por pasar el rato, que ya lo conocemos de otras veces, y resulta que había novedades, además de estar en obras y poder ver muy poco, sólo la
planta baja, resulta que empezaron a cobrar este año. Si el año pasado era gratis, le dijimos, no, no, siempre se ha cobrado, a nosotros nos lo vas a decir. El museo, desde luego, todas las veces que lo vimos, estaba vacío. Cuesta que por algo que siempre fue gratis tengas que pagar. Cuando la gente se acostumbre, volverá a llenarse de gente como antes. Con el tiempo, todo se consigue.