Los paisajes se detienen en lo minucioso o lo general de la
flora y fauna natural, o basados en proyectos tan importantes como el parque naturalizado de Rabé de las Calzadas, con multitud de especies vegetales nuevas, de monte, que han arraigado transformando unas cuestas pobres en una zona de descanso y ocio donde especies rastreras, matas y arbustos han hecho su aparición desde hace unos años para darle una vida y color nuevos a una zona que estaba deprimida y sin uso.

El camino de Santiago, con los árboles de siempre, y otros nuevos, que culminan en la fuente de los peregrinos donde las especies vegetales han hecho de ese enclave un auténtico oasis o zona de descanso y recreo para el peregrino que en su caminar busca sombras, bancos y una fuente para la sed del camino.

Otras veces la foto se centra en el pueblo, la iglesia, las calles, sus flores, la destacada cigüeña recién establecida y las fiestas, donde la alegría y el bullicio se mezclan con la fe y las ganas de recuperar lo de antaño, adaptarlo o crear nuevos espacios para uso público.