Una vez me dio por escribir un cuento pero no está corregido y lo iré haciendo sobre la marcha. Todavía no se si lo tendré que replantear o no. A ello voy. Lo haré en cómodas entregas para no aburrir.
EL CUENTO DE UNA PATATA: BLANCA DE CASTILLA
Nuestra patata pertenecía a una saga muy especial. Si bisabuela fue proclamada reina;, su abuela, su madre, y todos los desvelos de este año se dirigían a enseñarle a comportarse en sociedad. Formaba parte de la mas alta alcurnia a propósito de patatas, y sin embargo, en ella, existía un cierto vacío existencial. No era una patata común y vulgar como otras. La trataban de forma distinguida pero a ella no le gustaba ser así, ni que le designasen distinto trato.
Nada le resultaba tan aburrido como las clases de historia en las que se le repetía hasta la saciedad su noble abolengo. Hoy, princesa; y mañana, reina.
EL CUENTO DE UNA PATATA: BLANCA DE CASTILLA
Nuestra patata pertenecía a una saga muy especial. Si bisabuela fue proclamada reina;, su abuela, su madre, y todos los desvelos de este año se dirigían a enseñarle a comportarse en sociedad. Formaba parte de la mas alta alcurnia a propósito de patatas, y sin embargo, en ella, existía un cierto vacío existencial. No era una patata común y vulgar como otras. La trataban de forma distinguida pero a ella no le gustaba ser así, ni que le designasen distinto trato.
Nada le resultaba tan aburrido como las clases de historia en las que se le repetía hasta la saciedad su noble abolengo. Hoy, princesa; y mañana, reina.