OBSERVATORIO DE LUJO EN LA UBU
La paloma observaba con atención quien entraba y quien salía del recinto de la UBU de Burgos que se encuentran algunas de sus clases en el Hospital del Rey, edificios y conjunto arquitectónico muy emblemático por tanto arte e historia como atesora.
Si no lo conocéis, la próxima vez que visitéis Burgos echarle un vistazo porque merece la pena. Aunque no seáis estudiantes el recinto os acogerá como simples turistas.
En el verano se van a iniciar los cursos de verano en la universidad y la paloma seguirá atenta a ver quien entra o quien sale. Si no esa paloma, quizás otras. En Burgos por aves no será.
Los que examinaba la paloma desde la altura era el ajetreo de los estudiantes de bachillerato que se examinaban en Burgos los días 13, 14 y 15 de las pruebas de selectividad. Y hoy, ya es la jornada de reflexión para ellos y a esperar las notas se sus exámenes de selectividad. Mañana 22 ya sabrán sus notas, de sus aprobados o de sus suspensos. Y vuelta en septiembre los que no hayan pasado la criba esta vez. Con la suerte de que Burgos es fresco hasta en verano y el calor no suele sofocar mucho salvo ocasiones puntuales.
La paloma observaba con atención quien entraba y quien salía del recinto de la UBU de Burgos que se encuentran algunas de sus clases en el Hospital del Rey, edificios y conjunto arquitectónico muy emblemático por tanto arte e historia como atesora.
Si no lo conocéis, la próxima vez que visitéis Burgos echarle un vistazo porque merece la pena. Aunque no seáis estudiantes el recinto os acogerá como simples turistas.
En el verano se van a iniciar los cursos de verano en la universidad y la paloma seguirá atenta a ver quien entra o quien sale. Si no esa paloma, quizás otras. En Burgos por aves no será.
Los que examinaba la paloma desde la altura era el ajetreo de los estudiantes de bachillerato que se examinaban en Burgos los días 13, 14 y 15 de las pruebas de selectividad. Y hoy, ya es la jornada de reflexión para ellos y a esperar las notas se sus exámenes de selectividad. Mañana 22 ya sabrán sus notas, de sus aprobados o de sus suspensos. Y vuelta en septiembre los que no hayan pasado la criba esta vez. Con la suerte de que Burgos es fresco hasta en verano y el calor no suele sofocar mucho salvo ocasiones puntuales.