LA FUNCIÓN DE LA FANTASÍA
En la vida hay fantasía, magia, sueño. Y ese elemento lo cultivo sobre todo en mis últimos libros.
Toda persona tiene una parcela para soñar, recrear, y que quede dentro del corazón. Aquí en esta zona me voy a evadir pero yo mañana…
Porque a mi, como a muchas personas, la vida me ha golpeado mucho. Por eso el “Yo mañana...”
Tengo algo dentro de mi, una espiritualidad. Yo mañana seré más importante, que no es ser más rico, ni ser más poderoso; seré el máximo de lo que yo pueda ser, el límite de mis posibilidades.
Mis libros son mágicos.
“La vida es magia” Es difícil haber llegado a mi edad. Es un milagro llegar a la edad de cualquiera, estar vivo. La vida está acechada por millones de enfermedades, percances, accidentes, microbios, bacterias, virus, etc…
El día que tuve a mi hijo pensé que era un prodigio, algo que no tenía explicación posiable.
¿Quién te explica el por qué de la primera sonrisa del niño con su madre, de la primera conversación…?
Llevaba a mi hijo de la mano, y le apretaba una vez, y él respondía de igual forma, dos, tres veces así. Nunca en mi vida he tenido una conversación más bella con nadie.
NOTA DE CARMEN:
Me siguen emocionando sus palabras. Es tan cierto lo que decía Ana aquel día... ¡Cúantas veces tuve con mis hijos conversaciones así!
Los dos dormían en su cuna, al lado de mi cama, y algunas veces lloraban por la noche. Les daba la mano, y dejaban de llorar. Sobre todo cuando eran recién nacidos, y no les pasaba nada. Simplemente, creo que se querían sentir acompañados porque el mundo para un recién nacido es todo un mundo de sensaciones raras que nunca conoce hasta que no viene a verlo personalmente.
Incluso la vida de una cereza es una rareza. Y más en los sitios fríos. Si la flor se hiela, nunca llega a existir. Y en Burgos hay algunos años en que no hay nueces, ciruelas, cerezas. Aquí la vida de las plantas es más difícil que en los lugares cálidos. Pero la fruta que se consigue... vale lo que pesa en oro. Al menos para mi que valoro tanta dificultad como salva.
En la vida hay fantasía, magia, sueño. Y ese elemento lo cultivo sobre todo en mis últimos libros.
Toda persona tiene una parcela para soñar, recrear, y que quede dentro del corazón. Aquí en esta zona me voy a evadir pero yo mañana…
Porque a mi, como a muchas personas, la vida me ha golpeado mucho. Por eso el “Yo mañana...”
Tengo algo dentro de mi, una espiritualidad. Yo mañana seré más importante, que no es ser más rico, ni ser más poderoso; seré el máximo de lo que yo pueda ser, el límite de mis posibilidades.
Mis libros son mágicos.
“La vida es magia” Es difícil haber llegado a mi edad. Es un milagro llegar a la edad de cualquiera, estar vivo. La vida está acechada por millones de enfermedades, percances, accidentes, microbios, bacterias, virus, etc…
El día que tuve a mi hijo pensé que era un prodigio, algo que no tenía explicación posiable.
¿Quién te explica el por qué de la primera sonrisa del niño con su madre, de la primera conversación…?
Llevaba a mi hijo de la mano, y le apretaba una vez, y él respondía de igual forma, dos, tres veces así. Nunca en mi vida he tenido una conversación más bella con nadie.
NOTA DE CARMEN:
Me siguen emocionando sus palabras. Es tan cierto lo que decía Ana aquel día... ¡Cúantas veces tuve con mis hijos conversaciones así!
Los dos dormían en su cuna, al lado de mi cama, y algunas veces lloraban por la noche. Les daba la mano, y dejaban de llorar. Sobre todo cuando eran recién nacidos, y no les pasaba nada. Simplemente, creo que se querían sentir acompañados porque el mundo para un recién nacido es todo un mundo de sensaciones raras que nunca conoce hasta que no viene a verlo personalmente.
Incluso la vida de una cereza es una rareza. Y más en los sitios fríos. Si la flor se hiela, nunca llega a existir. Y en Burgos hay algunos años en que no hay nueces, ciruelas, cerezas. Aquí la vida de las plantas es más difícil que en los lugares cálidos. Pero la fruta que se consigue... vale lo que pesa en oro. Al menos para mi que valoro tanta dificultad como salva.