¡Cuánta profundidad hay en todo lo que hacemos!...

Y ya hemos cambiado de año. Desde la escuela se organizó la Tercera Semana Cultural, "Nuestro Camino", dedicado al Camino de Santiago. A la sazón, yo era presidenta de la Asocición "Río Urbel", y ese año lo dejé. Con tres años, ya vi que debía dejarlo a otros, y así lo hice.

Se me ocurrió alguna frase:

¿Qué es la vida sino un cruce de caminos"

- Camino de Santiago con el Camino del Cid- mi camino de procedencia. Y Burgos, participa de los dos.

¡Cuánta profundidad hay en todo lo que hacemos!

Desde que se idea- que surge por primera vez una idea al respecto, como aquí surgió con la 1ª SEMANA CULTURAL: "ESPERANDO A LA PRIMAVERA", luego se van haciendo las demás.

La gente se reúne, en estos casos, siempre los profesores con los padres y se sacan las ideas que más gustan a todos.

Luego se anotan, y después se hace un borrador antes de llevarlo a la imprenta - Y se lleva a cabo.

Un programa sin desarrollar es un papel sin fundamento.

Y sin embargo, estamos más que "mal acostumbrados"que la vida política funciones así. Un programa - que casi nunca se cumple. Pero eso es una reflexión personal nada más. De ahí la profundidad de lo que hacemos que tenemos mucha capacidad de relacionar unas cosas con otras.

Aquí, desde luego, los programas se desarrollaban. Nunca se repetían porque cada tema exigía un determinado tipo de actividades, propias con el enunciado del programa.

Y parecíamos hormiguitas trabajadoras haciendo de todo. Escribiendo cartas a los colaboradores, recogiendo lo que nos daban, ayudando a crear escenarios... poniendo vinos y pinchos. De todo hacíamos durante estas jornadas. Y escribir, un montón pues te surgían ideas de cualquier actividad. ¡Hasta barríamos el patio después de haber hecho la fiesta final!