Ilustración de un camión empleado para estudios vibrosísmicos....

ESTUDIOS SÍSMICOS

Descripción del trabajo

Los estudios sísmicos se basan en las distintas propiedades elásticas que se
pueden encontrar en las diferentes capas del subsuelo en función de la composición de las mismas. Para ello, se produce una vibración en la superficie que irá atravesando e irá a su vez rebotando en las distintas capas.

En la superficie se coloca una serie de sensores llamados geófonos, que son los
encargados de medir las vibraciones rebotadas por las capas internas. Mediante una fase posterior de procesado de datos, dichas mediciones son empleadas para crear representaciones geológicas del interior de la Tierra.

El mecanismo más sencillo para generar las vibraciones sobe el suelo, que
recibe el nombre de vibrosísmica, es emplear un camión equipado con martillo o vibro.

Generalmente son vehículos todoterreno que, a través de una plancha de apoyo,
transmiten al terreno ondas elásticas con la energía necesaria para conseguir las
reflexiones deseadas en las capas del subsuelo. El mecanismo de generación de la
vibración es una masa giratoria excéntrica montada sobre el vehículo, existiendo
posibilidades de regulación que permiten vibrar hasta en la vecindad de edificaciones sin provocar daños.

A continuación se puede ver un esquema del funcionamiento de un camión con martillo.

Ilustración de un camión empleado para estudios vibrosísmicos.

Como método alternativo de producción de vibraciones se puede hacer uso de
explosivos. En este caso, se detonan cargas de explosivo de unos 500-600 gramos,
situadas en pozos excavados a una profundidad de unos 6-10 metros. Las ondas son
absorbidas por el propio suelo en mayor medida cuanto más profundo es el pozo, por
lo que el sonido en el exterior es menor, minimizando así las molestias que pudieran
ocasionarse a la fauna del lugar.

Habitualmente se detona una sola carga en cada disparo. Los barrenos se
perforan utilizando máquinas perforadoras autopropulsadas. Este método se utilizará
en los casos en que la orografía del terreno imposibilite el acceso de los camiones
vibradores o en aquellas otras situaciones en que la vibrosísmica no resulte
recomendable.
En el supuesto de orografías excepcionalmente difíciles, puede ser necesario
recurrir a la perforación ¡con sondas ligeras transportadas a mano o con ayuda de
caballerías ¡de barrenos de 2 a 5 metros de profundidad, detonándose
simultáneamente varios de ellos, con cargas unitarias de unos 100 a 200 gramos.

NOTA DE CARMEN: yo, desde luego, no voy a pasarme todo el tiempo corrigiendo a esta gente. Y ésto, es otro de los aspectos de poca importancia que decía la diputada y geóloga de Guadalajara." No pasa nada, nada de nada..." Pues si señora diputada, pasa y mucho. Que tienen un buen repertorio de maquinaria usada para que les rente sus compras del pasado; y de prometedores planes, nada de nada, tampoco.