EL BIEN COMÚN
Como bien dice la palabra el bien común es un bien de todos y para todos. Si se da en positivos a todos alcanza, si se da en negativo, todos lo sufren.
Y en el bien, se encuentra todo lo que nos rodea. El bien artístico, monumental, que la historia de la humanidad ha ido construyendo con la propia dificultad de cada época, y que constituyen nuestras raíces.
Una planta sin raíces se seca, se muere. Y nosotros, lo queramos reconocer o no, también; nos puede pasar eso si no construimos a partir del esfuerzo que otros hicieron, y no lo valoramos como nuestro.
Es como si nos propusiéramos empezar de cero, pues nos costaría mucho mas avanzar que si nos atenemos a lo que ya hizo un día grande a un pueblo.
Para que se hayan despreciado tanto las raíces, cabe encontrar una razón, el egoísmo, el conseguir dinero o mas producción, a costa de olvidar, eludir, o no querer reconocer nuestra propia historia; y todo por intereses creados. Que afortunadamente fracasaron por la propia ineptitud de quienes quisieron conseguir tanto y tanto. Se quedaron en nada.
Y eso en cuanto a las piedras sagradas que se tuvieron que poner en valor y no se pusieron, sino que se enterraron.
Para luego, los bienes naturales, como capítulo aparte.
FOTO: Ruinas Romanas de Mérida
Como bien dice la palabra el bien común es un bien de todos y para todos. Si se da en positivos a todos alcanza, si se da en negativo, todos lo sufren.
Y en el bien, se encuentra todo lo que nos rodea. El bien artístico, monumental, que la historia de la humanidad ha ido construyendo con la propia dificultad de cada época, y que constituyen nuestras raíces.
Una planta sin raíces se seca, se muere. Y nosotros, lo queramos reconocer o no, también; nos puede pasar eso si no construimos a partir del esfuerzo que otros hicieron, y no lo valoramos como nuestro.
Es como si nos propusiéramos empezar de cero, pues nos costaría mucho mas avanzar que si nos atenemos a lo que ya hizo un día grande a un pueblo.
Para que se hayan despreciado tanto las raíces, cabe encontrar una razón, el egoísmo, el conseguir dinero o mas producción, a costa de olvidar, eludir, o no querer reconocer nuestra propia historia; y todo por intereses creados. Que afortunadamente fracasaron por la propia ineptitud de quienes quisieron conseguir tanto y tanto. Se quedaron en nada.
Y eso en cuanto a las piedras sagradas que se tuvieron que poner en valor y no se pusieron, sino que se enterraron.
Para luego, los bienes naturales, como capítulo aparte.
FOTO: Ruinas Romanas de Mérida
EL AGUA COMO BIEN COMÚN
Es una riqueza de incalculable valor, o al menos así lo viví. Que la naturaleza haga un esfuerzo supremo en dar lo que guarda en su interior, y lo despreciemos... No tiene nombre esa actuación. Cuando hay tantos y tantos pueblos que el carecer de agua les impide progresar y sus gente mueren, malviven, víctimas de la sequía, y aquí se haya desprecido y esquilmado...
La naturaleza, por si sola, es capaz de regenerarse, si no fuera por la acción del hombre, que se lo impide. Pero desgraciadamente, el que no valora lo que tiene, no lo puede cuidar. Le falta el amor debido a la naturaleza.
Es de locos creer que porque somos hombres debemos someter a la naturaleza, anularla y cegarla con el fin de conseguir mas y mas.
Cada vez menos y menos somos; menos y menos tenemos. Cada vez más pobres sin raíces históricas, sin naturaleza viva, sin recursos y lo que es peor, sin valores humanos.
Los arroyos están denostados, el campo sin arbolado, y los proyectos que deberían haber sido fuente de riqueza, ahora son fuente de pobreza para todos.
¿Y todo por qué?
Porque no se quiso hacer bien las cosas y fueron degenerando poco a poco. Y si se mira, con todos los proyectos anteriores ha pasado mas de lo mismo. Y al final... ruina natural, humana y social.
Y no vale que nos pasemos la vida culpando a los demás de nuestros propios errores, que si se hubiera puesto empeño, se hubiesen recuperado los manantiales, pero la consigna quizás la dictaba alguien ajeno a nosotros, y nosotros asumíamos sin reparar en daños.
Es una riqueza de incalculable valor, o al menos así lo viví. Que la naturaleza haga un esfuerzo supremo en dar lo que guarda en su interior, y lo despreciemos... No tiene nombre esa actuación. Cuando hay tantos y tantos pueblos que el carecer de agua les impide progresar y sus gente mueren, malviven, víctimas de la sequía, y aquí se haya desprecido y esquilmado...
La naturaleza, por si sola, es capaz de regenerarse, si no fuera por la acción del hombre, que se lo impide. Pero desgraciadamente, el que no valora lo que tiene, no lo puede cuidar. Le falta el amor debido a la naturaleza.
Es de locos creer que porque somos hombres debemos someter a la naturaleza, anularla y cegarla con el fin de conseguir mas y mas.
Cada vez menos y menos somos; menos y menos tenemos. Cada vez más pobres sin raíces históricas, sin naturaleza viva, sin recursos y lo que es peor, sin valores humanos.
Los arroyos están denostados, el campo sin arbolado, y los proyectos que deberían haber sido fuente de riqueza, ahora son fuente de pobreza para todos.
¿Y todo por qué?
Porque no se quiso hacer bien las cosas y fueron degenerando poco a poco. Y si se mira, con todos los proyectos anteriores ha pasado mas de lo mismo. Y al final... ruina natural, humana y social.
Y no vale que nos pasemos la vida culpando a los demás de nuestros propios errores, que si se hubiera puesto empeño, se hubiesen recuperado los manantiales, pero la consigna quizás la dictaba alguien ajeno a nosotros, y nosotros asumíamos sin reparar en daños.
Debe haber fallos en el sistema de foro común, pues estos videos si están disponibles en facebook. En otro foro al que los he enviado, también ha funcionado el enlace. Igual hay que copiarlo y pegarlo. Lo he comprobado y por eso lo sé.
Se me hace tarde y lo dejo. No todo funciona en todos los sitios. Puedo dar fe que en otros sitios si funciona. Aquí no sé el fallo.
Saludos
Se me hace tarde y lo dejo. No todo funciona en todos los sitios. Puedo dar fe que en otros sitios si funciona. Aquí no sé el fallo.
Saludos