LAS PRIMERAS NIEVES a golpe de radio digital "A COTENAS POR LA RADIO" DE MOLINA DE ARAGÓN EN LA CRÓNICA DE AYER
¡Menuda nochecita, venga toser con mi primer catarro del año! Con las primeras nieves, otoñales. Aplaudidas y recogidas en imágenes. Gracias a que una se conoce, tiene en casa remedios de farmacia, de hierbas y de imaginación. ¡Uy!, si por casualidad tuviera Ibuprofeno... Pues sí, caducado, pero una sabe que hay medicinas que aunque la fecha diga que caduca, la tomas, y como el primer día. ¡Mecachis, que me iba a pasar de curar porque la caja indicara que su tiempo de vigencia había extinguido su plazo en tres o cuatro meses! Hay que intentar sacudirse la tranca cuanto antes, y poder conciliar el sueño. Y mira, qué acierto, por la mañana, ya mejor, y a sacar fotos desde el tejado de mi casa.
Una, a veces, parece maga: te levantas, la tarta hecha, las judías rojas remojadas, los pichones, pelados. Una maga, es lo que soy. Y encima, me di un paseo por la Molina digital y radiofónica por no perderme una bonita historia de amor, de una canción de mi infancia: "Mambrú se fue a la guerra, no sé cuando vendrá". Historia, leyenda... no sé, pero algo mágico, que la gente, mucho tiempo después es capaz de recrear. Me gustó mucho.
También volver a escuchar el tema del antifracking, con las voces, casi, casi, tan familiares, de las personas de mi tierra. La alcaldesa de Mazarete, cuyo pueblo linda con el mío. Y se pasa del páramo más desalmado, a un auténtico paraíso, que quiso resistirse a ser quemado del todo. Por obra y gracia del os vientos que al llegar a la ermita del Buen Labrado, se pararon. En la otra banda, el Alcalde de Luzón...
¡qué tertulia! Dios, tan cerca de mi pequeño pueblo, tiene el mandato una señora que sabe tanto de geología, de leyes, de medio ambiente, de turismo. Y su oponente, de todo eso y de mucho más. De ecología, de naturaleza, de cuidado de la tierra, de lucha por un pueblo que le pertenece y que no quiere que nadie se lo llene de aguas residuales, que de producirse tal cosa, eso es lo que esa gente dejará: Una ruina, donde hoy por hoy, hay una belleza de incalculable valor.
A mi me van a decir, que sé perfectamente, que una foto puede ser perfecta, porque lo que hay esencialmente, no lo capta la cámara. El hedor del agua, una bandada de mosquitos, y la imposibilidad de darte un baño, si te apeteciera, a orillas del Arlazón, aguas abajo de Burgos, capital. Aguas contaminadas, y poder beber agua, si ésta pasa por tu contador, debidamente clorada, y bajo pago de las tasas correspondientes, de agua, basura y alcantarillado a la capital, que es quien sí puede tener agua buena, una vez que nos contaminaron los acuíferos de tiempos inmemoriales.
No perdáis nunca vuestra esencia, paisanos, que nadie tiene la magia de la recuperación, si la magia de la naturaleza nos abandona. En las fotos no se ve lo que la realidad muestra: el aire puro, y las aguas limpias y transparentes.
Me gustó lo que dijo Lucía Enjuto, que antes que diputada era alcaldesa, y ello le daba la oportunidad de formar parte en la administración de los pueblos a la que pertenece.
Aunque os parezca raro, aquí en Burgos, hay diputados que por no saber, no saben ni hablar. O si saben, lo disimulan mucho, o no lo necesitan. Eso pasa porque la gente no es crítica, y si lo es, ya puede buscarse sus medios propios, y más en crisis. Gracias a que me di cuenta a tiempo, que necesitaba foros donde poder plasmar mis ideas y pensamientos, una vez que llegó la crisis, con la escasez del papel. Si no, no me hubiera leído ni el gato. Así, hasta el gato que quiera me lee. Pero no es un camino, ni mucho menos fácil en un sitio donde se tiene la creencia de que CALLAR ES DE SABIOS. No comulgo con esa creencia. En mi tierra dicen lo contrario: EL QUE CALLA, OTORGA. Son distintas formas de pensar, y si uno defiende lo que un día le enseñaron, no hay más remedio que se produzca un choque de ideas.
A pesar de estar más adelantados en los temas fracking en Burgos, no he visto debate apenas. Pocos han salido a explicar, ni nadie les ha citado, tampoco. Y en Guadalajara, en ese sentido se está dando la talla. Aquí, sólo se ha alabado estos proyectos en los medios y en la Universidad, a favor, claro. Y no es raro, pues si se denosta al contrario, la vía que queda... es la que conviene, la oficial. De una forma muy sibilina, y aún así, he visto por donde va el asunto. El resultado, es que aquí hay desde el 2011, la tira de permisos ya concedidos.
Sigo con la señora Enjuto en cuanto a las competencias de estos proyectos fracking, en que ayuntamientos y gobierno deciden, según sus palabras telefónicas. Ella en esto fue clara, en explicar las leyes al respecto.
Aunque hay una pequeña trampa, pues el pez grande se come al chico. Al pueblo, se lo come el Estado. Si el pueblo tiene competencias, tal como ella aduce, ¿por qué no se los tiene en cuanta, que nadie se ha puesto en contacto con ellos, por qué no les contestan a los requerimientos oficiales que les hacen?
Aquí en Burgos, tienen una mano zurda increíble. Un señor alcalde que es diputado también, en su pueblo, vota antifracking; y luego en la diputación, a favor del fracking, con un par.
Si resulta que como dice Lucía Enjuto, es primordial ser alcaldesa, y si no, no serían diputados, ya me dirán cómo usan los votos estos señores diputados burgaleses anulando la voz de quienes le votaron falseándolos. Unas contradicciones... que se dan en todas partes. Par mí, un abuso total de competencias, y totalmente legisladas.
¡FELIZ DOMINGO A TODOS! (Ya estoy un pelín mejor, pero sin cantar victoria hasta no derrotar al enemigo del catarro)
¡Menuda nochecita, venga toser con mi primer catarro del año! Con las primeras nieves, otoñales. Aplaudidas y recogidas en imágenes. Gracias a que una se conoce, tiene en casa remedios de farmacia, de hierbas y de imaginación. ¡Uy!, si por casualidad tuviera Ibuprofeno... Pues sí, caducado, pero una sabe que hay medicinas que aunque la fecha diga que caduca, la tomas, y como el primer día. ¡Mecachis, que me iba a pasar de curar porque la caja indicara que su tiempo de vigencia había extinguido su plazo en tres o cuatro meses! Hay que intentar sacudirse la tranca cuanto antes, y poder conciliar el sueño. Y mira, qué acierto, por la mañana, ya mejor, y a sacar fotos desde el tejado de mi casa.
Una, a veces, parece maga: te levantas, la tarta hecha, las judías rojas remojadas, los pichones, pelados. Una maga, es lo que soy. Y encima, me di un paseo por la Molina digital y radiofónica por no perderme una bonita historia de amor, de una canción de mi infancia: "Mambrú se fue a la guerra, no sé cuando vendrá". Historia, leyenda... no sé, pero algo mágico, que la gente, mucho tiempo después es capaz de recrear. Me gustó mucho.
También volver a escuchar el tema del antifracking, con las voces, casi, casi, tan familiares, de las personas de mi tierra. La alcaldesa de Mazarete, cuyo pueblo linda con el mío. Y se pasa del páramo más desalmado, a un auténtico paraíso, que quiso resistirse a ser quemado del todo. Por obra y gracia del os vientos que al llegar a la ermita del Buen Labrado, se pararon. En la otra banda, el Alcalde de Luzón...
¡qué tertulia! Dios, tan cerca de mi pequeño pueblo, tiene el mandato una señora que sabe tanto de geología, de leyes, de medio ambiente, de turismo. Y su oponente, de todo eso y de mucho más. De ecología, de naturaleza, de cuidado de la tierra, de lucha por un pueblo que le pertenece y que no quiere que nadie se lo llene de aguas residuales, que de producirse tal cosa, eso es lo que esa gente dejará: Una ruina, donde hoy por hoy, hay una belleza de incalculable valor.
A mi me van a decir, que sé perfectamente, que una foto puede ser perfecta, porque lo que hay esencialmente, no lo capta la cámara. El hedor del agua, una bandada de mosquitos, y la imposibilidad de darte un baño, si te apeteciera, a orillas del Arlazón, aguas abajo de Burgos, capital. Aguas contaminadas, y poder beber agua, si ésta pasa por tu contador, debidamente clorada, y bajo pago de las tasas correspondientes, de agua, basura y alcantarillado a la capital, que es quien sí puede tener agua buena, una vez que nos contaminaron los acuíferos de tiempos inmemoriales.
No perdáis nunca vuestra esencia, paisanos, que nadie tiene la magia de la recuperación, si la magia de la naturaleza nos abandona. En las fotos no se ve lo que la realidad muestra: el aire puro, y las aguas limpias y transparentes.
Me gustó lo que dijo Lucía Enjuto, que antes que diputada era alcaldesa, y ello le daba la oportunidad de formar parte en la administración de los pueblos a la que pertenece.
Aunque os parezca raro, aquí en Burgos, hay diputados que por no saber, no saben ni hablar. O si saben, lo disimulan mucho, o no lo necesitan. Eso pasa porque la gente no es crítica, y si lo es, ya puede buscarse sus medios propios, y más en crisis. Gracias a que me di cuenta a tiempo, que necesitaba foros donde poder plasmar mis ideas y pensamientos, una vez que llegó la crisis, con la escasez del papel. Si no, no me hubiera leído ni el gato. Así, hasta el gato que quiera me lee. Pero no es un camino, ni mucho menos fácil en un sitio donde se tiene la creencia de que CALLAR ES DE SABIOS. No comulgo con esa creencia. En mi tierra dicen lo contrario: EL QUE CALLA, OTORGA. Son distintas formas de pensar, y si uno defiende lo que un día le enseñaron, no hay más remedio que se produzca un choque de ideas.
A pesar de estar más adelantados en los temas fracking en Burgos, no he visto debate apenas. Pocos han salido a explicar, ni nadie les ha citado, tampoco. Y en Guadalajara, en ese sentido se está dando la talla. Aquí, sólo se ha alabado estos proyectos en los medios y en la Universidad, a favor, claro. Y no es raro, pues si se denosta al contrario, la vía que queda... es la que conviene, la oficial. De una forma muy sibilina, y aún así, he visto por donde va el asunto. El resultado, es que aquí hay desde el 2011, la tira de permisos ya concedidos.
Sigo con la señora Enjuto en cuanto a las competencias de estos proyectos fracking, en que ayuntamientos y gobierno deciden, según sus palabras telefónicas. Ella en esto fue clara, en explicar las leyes al respecto.
Aunque hay una pequeña trampa, pues el pez grande se come al chico. Al pueblo, se lo come el Estado. Si el pueblo tiene competencias, tal como ella aduce, ¿por qué no se los tiene en cuanta, que nadie se ha puesto en contacto con ellos, por qué no les contestan a los requerimientos oficiales que les hacen?
Aquí en Burgos, tienen una mano zurda increíble. Un señor alcalde que es diputado también, en su pueblo, vota antifracking; y luego en la diputación, a favor del fracking, con un par.
Si resulta que como dice Lucía Enjuto, es primordial ser alcaldesa, y si no, no serían diputados, ya me dirán cómo usan los votos estos señores diputados burgaleses anulando la voz de quienes le votaron falseándolos. Unas contradicciones... que se dan en todas partes. Par mí, un abuso total de competencias, y totalmente legisladas.
¡FELIZ DOMINGO A TODOS! (Ya estoy un pelín mejor, pero sin cantar victoria hasta no derrotar al enemigo del catarro)