ESTO SI QUE ES UNA BUENA CARRERA DEPORTIVA HASTA GANAR
EL DIARIO DE LEÓN. ES
El TSJ frena en seco las pretensiones de Cosmos para coincinerar residuos
Anula la autorización ambiental integral concedida por la Junta en el año 2008.
CARLOS FIDALGO | PONFERRADA 03/01/2014
El atleta Miguel Basurko, con traje de esqueleto, encabezó el 12 de julio de 2011 uno de sus maratones contra la incineración. El atleta Miguel Basurko, con traje de esqueleto, encabezó el 12 de julio de 2011 uno de sus maratones contra la incineración.
ana f. barredo
Los consejos reguladores de los productos de calidad del Bierzo acaban de ganar una batalla que puede ser decisiva a la hora de evitar la incineración de residuos en la cementera de Cosmos en Toral de los Vados. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla y León acaba de frenar en seco las pretensiones de Cosmos de ejercer como gestor de residuos al anular la Orden del 28 de mayo de 2008 con la que la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León concedía a la cementera la autorización ambiental integral que hasta el momento ya ha amparado la quema de biomasa y la modificación de las instalaciones de la planta de Toral para iniciar en un hipotético futuro la coincineración.
Según la sentencia de la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJ a la que ha accedido este periódico, las autorizaciones de las que disponía la empresa para producir cemento y clínker «no amparaban la actividad que se está realizando en su integridad» y la cementera debería haberse sometido a un estudio de impacto ambiental para ejercer como gestor y productor de nuevos residuos. Los cuatro ponentes de la sentencia consideran, al contrario de lo que en su día argumentó la administración autonómica, que Cosmos ha emprendido una «nueva actividad» y estiman de esta forma el recurso contencioso interpuesto por los consejos reguladores del vino del Bierzo, la manzana reineta y la pera conferencia.
«Una buena noticia»
«Sin duda es una buena noticia para el Bierzo», aseguró ayer el abogado de los consejos reguladores y portavoz de la plataforma Salvemos el Bierzo, que ha aglutinado al sector agroalimentario y a los ecologistas opuestos a la incineración, Ángel Gómez. «Si se pide la ejecución de la sentencia, ni siquiera pueden seguir quemando biomasa ni modificar la planta como han hecho para una posible incineración», añadió Gómez, convencido de que «se ha dado un paso muy importante» en la batalla que los consejos reguladores y los ecologistas mantienen contra Cosmos.
La Junta de Castilla y León —que en la actualidad ha iniciado la promulgación de una polémica Ley de Residuos que los ecologistas consideran otra forma de abrir la puerta a la incineración en una cementera como la de Toral de los Vados— había dejado un cabo suelto cuando la presión social contra los planes de Cosmos obligó a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente a emitir el 5 de julio de 2011 una nueva orden que impedía a la cementera iniciar la valorización energética de residuos no peligrosos, pero que no anulaba la Orden anterior de 2008 con la autorización ambiental integral.
La sentencia del TSJ, que todavía puede recurrirse ante el Tribunal Supremo, considera que los recurrentes han puesto de relieve con los informes periciales «la relación entre las emisiones gaseosas y residuos sólidos de las plantas de incineración y sus efectos perjudiciales para la salud humana y su efecto negativo en general para todas las producciones agrícolas y ganaderas de la comarca, en particular en viñedos y plantaciones frutales, con la correspondiente merma de la demanda de esos productos».
Los consejos reguladores habían argumentado que las dioxinas y furanos procedentes de la incineración autorizada podrían «provocar la ruina de la comarca» porque «llega a los seres humanos a través de los alimentos, por lo que muchas empresas de alimentación, por ejemplo la empresa Banduelle, no adquieren productos que estén en un radio de acción inferior a 20 kilómetros de una incineradora». Los consejos reguladores habían insistido en su demanda que «utilizan como carta de presentación, marchamo o icono la calidad tanto de los productos de su tierra y sus gentes, lo que se vería truncado se instala la incineradora o coincineradora porque tarde o temprano, en todos los productos: manzanas, uva, carne, leche, pimientos, tomantes, aparecerían dioxinas y furanos y los productos serían rechazados en el mercado al ser aquellos elementos cancerígenos reconocidos por la Organización Mundial de la Salud.
Gómez espera ahora que la sentencia sirva para excluir al Bierzo de la Ley de Residuos que prepara la Junta.
EL DIARIO DE LEÓN. ES
El TSJ frena en seco las pretensiones de Cosmos para coincinerar residuos
Anula la autorización ambiental integral concedida por la Junta en el año 2008.
CARLOS FIDALGO | PONFERRADA 03/01/2014
El atleta Miguel Basurko, con traje de esqueleto, encabezó el 12 de julio de 2011 uno de sus maratones contra la incineración. El atleta Miguel Basurko, con traje de esqueleto, encabezó el 12 de julio de 2011 uno de sus maratones contra la incineración.
ana f. barredo
Los consejos reguladores de los productos de calidad del Bierzo acaban de ganar una batalla que puede ser decisiva a la hora de evitar la incineración de residuos en la cementera de Cosmos en Toral de los Vados. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla y León acaba de frenar en seco las pretensiones de Cosmos de ejercer como gestor de residuos al anular la Orden del 28 de mayo de 2008 con la que la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León concedía a la cementera la autorización ambiental integral que hasta el momento ya ha amparado la quema de biomasa y la modificación de las instalaciones de la planta de Toral para iniciar en un hipotético futuro la coincineración.
Según la sentencia de la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJ a la que ha accedido este periódico, las autorizaciones de las que disponía la empresa para producir cemento y clínker «no amparaban la actividad que se está realizando en su integridad» y la cementera debería haberse sometido a un estudio de impacto ambiental para ejercer como gestor y productor de nuevos residuos. Los cuatro ponentes de la sentencia consideran, al contrario de lo que en su día argumentó la administración autonómica, que Cosmos ha emprendido una «nueva actividad» y estiman de esta forma el recurso contencioso interpuesto por los consejos reguladores del vino del Bierzo, la manzana reineta y la pera conferencia.
«Una buena noticia»
«Sin duda es una buena noticia para el Bierzo», aseguró ayer el abogado de los consejos reguladores y portavoz de la plataforma Salvemos el Bierzo, que ha aglutinado al sector agroalimentario y a los ecologistas opuestos a la incineración, Ángel Gómez. «Si se pide la ejecución de la sentencia, ni siquiera pueden seguir quemando biomasa ni modificar la planta como han hecho para una posible incineración», añadió Gómez, convencido de que «se ha dado un paso muy importante» en la batalla que los consejos reguladores y los ecologistas mantienen contra Cosmos.
La Junta de Castilla y León —que en la actualidad ha iniciado la promulgación de una polémica Ley de Residuos que los ecologistas consideran otra forma de abrir la puerta a la incineración en una cementera como la de Toral de los Vados— había dejado un cabo suelto cuando la presión social contra los planes de Cosmos obligó a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente a emitir el 5 de julio de 2011 una nueva orden que impedía a la cementera iniciar la valorización energética de residuos no peligrosos, pero que no anulaba la Orden anterior de 2008 con la autorización ambiental integral.
La sentencia del TSJ, que todavía puede recurrirse ante el Tribunal Supremo, considera que los recurrentes han puesto de relieve con los informes periciales «la relación entre las emisiones gaseosas y residuos sólidos de las plantas de incineración y sus efectos perjudiciales para la salud humana y su efecto negativo en general para todas las producciones agrícolas y ganaderas de la comarca, en particular en viñedos y plantaciones frutales, con la correspondiente merma de la demanda de esos productos».
Los consejos reguladores habían argumentado que las dioxinas y furanos procedentes de la incineración autorizada podrían «provocar la ruina de la comarca» porque «llega a los seres humanos a través de los alimentos, por lo que muchas empresas de alimentación, por ejemplo la empresa Banduelle, no adquieren productos que estén en un radio de acción inferior a 20 kilómetros de una incineradora». Los consejos reguladores habían insistido en su demanda que «utilizan como carta de presentación, marchamo o icono la calidad tanto de los productos de su tierra y sus gentes, lo que se vería truncado se instala la incineradora o coincineradora porque tarde o temprano, en todos los productos: manzanas, uva, carne, leche, pimientos, tomantes, aparecerían dioxinas y furanos y los productos serían rechazados en el mercado al ser aquellos elementos cancerígenos reconocidos por la Organización Mundial de la Salud.
Gómez espera ahora que la sentencia sirva para excluir al Bierzo de la Ley de Residuos que prepara la Junta.
DIARIO DE BURGOS
La catástrofe que nunca sucedió
J. López (Ical) - viernes, 03 de enero de 2014
70 años después del peor accidente ferroviario de la historia de España en Torre del Bierzo (León), aún se desconoce la cifra de fallecidos a causa de la recia censura del régimen franquista
En Torre del Bierzo pasaban 20 minutos de las 13 horas del 3 de enero de 1944. El tren correo-expreso 421, con una docena de vagones, nunca vio la luz al final del túnel número 20 de la línea Madrid-La Coruña. Los frenos le fallaron al descender el puerto del Manzanal y colisionó en la oscuridad contra una máquina de maniobras a la que no dio tiempo a retirarse. Para más inri, la imposibilidad de detenerse de un tren carbonero con casi una treintena de vagones y casi 750 toneladas de carga que llegaba en sentido contrario propició otro choque certero. Acabó de violentar el accidente ferroviario más importante de la historia de España.
Siete décadas después, la comarca no olvida, a pesar de la recia censura aplicada por Franco en aquel momento. Los periódicos regionales y nacionales de la época taponaron la información sobre el accidente y priorizaron las batallas de la II Guerra Mundial, que por aquella fecha se centraba en zonas soviéticas y en el centro de Italia, así como la esperada llegada de los Reyes Magos, que también ocupó aquel día las portadas de los diarios.
Despacharon el suceso con algunos breves y algún párrafo el 4 de enero. Pero olvidaron para siempre, de forma dictada y suspicaz, citarlo en días posteriores, a pesar de que en él pudieron perecer entre 500 y 800 personas, según el libro Guinness, una cifra aún por determinar 70 años después, y que el régimen redujo por debajo del centenar de forma oficial.
Estudios recientes los cifran en unos 250. España enmudeció por orden de un régimen neonato que no quería mostrar señales de debilidad y producir un impacto negativo en la sociedad ni de cara al exterior. Para ello, vetó la presencia de periodistas en la zona y negó las publicaciones sobre la catástrofe en los diarios en los días siguientes. Con ello, se obvió a los cientos de pasajeros atrapados y fallecidos, a los que sólo les quedó el imborrable recuerdo de los vecinos de Torre del Bierzo y la ayuda de los habitantes de la zona.
El descarrilamiento del Alvia en Santiago de Compostela el pasado mes de julio reabrió las heridas que dejó en este pueblo berciano el trágico accidente de ferrocarril en el túnel de Peñacallada, 158 metros de oscuridad ahora desaparecidos. Pero al menos la hazaña de los vecinos de Angrois, héroes al contribuir con su aportación en este fatídico accidente, pudo ser contada al mundo entero. Tuvo que pasar mucho tiempo para conocer la labor solidaria de los habitantes de Torre del Bierzo. Aún hoy sólo quedan puntuales recuerdos de algunos testigos.
Origen. Ninguno de los periódicos de la época profundizó en el origen del suceso debido a los diversos intereses. ABC señaló que podría deberse a «una extraordinaria coincidencia de causas, entre las cuales debe considerarse en su justo valor el largo uso del material móvil». Un problema de frenos se unió a una infraestructura vial con numerosos fallos sin reparar, afectada tras la Guerra Civil. A ello se sumó que Renfe aún se estaba configurando (se había creado tres años antes). Un cúmulo de circunstancias que la censura optó por esconder.
Casi todos los diarios de la época recogen en sus páginas, aunque no de forma extensa, el suceso de Torre del Bierzo, pero pocos lo hacen en portada. Sí lo hizo Diario de Burgos, que titula en primera ‘Gravísimo accidente ferroviario en un túnel’. Diario Regional, ya desaparecido, llevó a la portada la información publicada por la agencia CIFRA con un directo ‘Choque de trenes en el túnel de Torre, de la línea Palencia-La Coruña’.
Ahí concluyeron las aperturas de la prensa sobre el accidente ferroviario más importante de la historia de España. Diario Palentino, El Norte de Castilla o Diario de León llevaron la información en páginas interiores.
La catástrofe que nunca sucedió
J. López (Ical) - viernes, 03 de enero de 2014
70 años después del peor accidente ferroviario de la historia de España en Torre del Bierzo (León), aún se desconoce la cifra de fallecidos a causa de la recia censura del régimen franquista
En Torre del Bierzo pasaban 20 minutos de las 13 horas del 3 de enero de 1944. El tren correo-expreso 421, con una docena de vagones, nunca vio la luz al final del túnel número 20 de la línea Madrid-La Coruña. Los frenos le fallaron al descender el puerto del Manzanal y colisionó en la oscuridad contra una máquina de maniobras a la que no dio tiempo a retirarse. Para más inri, la imposibilidad de detenerse de un tren carbonero con casi una treintena de vagones y casi 750 toneladas de carga que llegaba en sentido contrario propició otro choque certero. Acabó de violentar el accidente ferroviario más importante de la historia de España.
Siete décadas después, la comarca no olvida, a pesar de la recia censura aplicada por Franco en aquel momento. Los periódicos regionales y nacionales de la época taponaron la información sobre el accidente y priorizaron las batallas de la II Guerra Mundial, que por aquella fecha se centraba en zonas soviéticas y en el centro de Italia, así como la esperada llegada de los Reyes Magos, que también ocupó aquel día las portadas de los diarios.
Despacharon el suceso con algunos breves y algún párrafo el 4 de enero. Pero olvidaron para siempre, de forma dictada y suspicaz, citarlo en días posteriores, a pesar de que en él pudieron perecer entre 500 y 800 personas, según el libro Guinness, una cifra aún por determinar 70 años después, y que el régimen redujo por debajo del centenar de forma oficial.
Estudios recientes los cifran en unos 250. España enmudeció por orden de un régimen neonato que no quería mostrar señales de debilidad y producir un impacto negativo en la sociedad ni de cara al exterior. Para ello, vetó la presencia de periodistas en la zona y negó las publicaciones sobre la catástrofe en los diarios en los días siguientes. Con ello, se obvió a los cientos de pasajeros atrapados y fallecidos, a los que sólo les quedó el imborrable recuerdo de los vecinos de Torre del Bierzo y la ayuda de los habitantes de la zona.
El descarrilamiento del Alvia en Santiago de Compostela el pasado mes de julio reabrió las heridas que dejó en este pueblo berciano el trágico accidente de ferrocarril en el túnel de Peñacallada, 158 metros de oscuridad ahora desaparecidos. Pero al menos la hazaña de los vecinos de Angrois, héroes al contribuir con su aportación en este fatídico accidente, pudo ser contada al mundo entero. Tuvo que pasar mucho tiempo para conocer la labor solidaria de los habitantes de Torre del Bierzo. Aún hoy sólo quedan puntuales recuerdos de algunos testigos.
Origen. Ninguno de los periódicos de la época profundizó en el origen del suceso debido a los diversos intereses. ABC señaló que podría deberse a «una extraordinaria coincidencia de causas, entre las cuales debe considerarse en su justo valor el largo uso del material móvil». Un problema de frenos se unió a una infraestructura vial con numerosos fallos sin reparar, afectada tras la Guerra Civil. A ello se sumó que Renfe aún se estaba configurando (se había creado tres años antes). Un cúmulo de circunstancias que la censura optó por esconder.
Casi todos los diarios de la época recogen en sus páginas, aunque no de forma extensa, el suceso de Torre del Bierzo, pero pocos lo hacen en portada. Sí lo hizo Diario de Burgos, que titula en primera ‘Gravísimo accidente ferroviario en un túnel’. Diario Regional, ya desaparecido, llevó a la portada la información publicada por la agencia CIFRA con un directo ‘Choque de trenes en el túnel de Torre, de la línea Palencia-La Coruña’.
Ahí concluyeron las aperturas de la prensa sobre el accidente ferroviario más importante de la historia de España. Diario Palentino, El Norte de Castilla o Diario de León llevaron la información en páginas interiores.