UNA OBRA DE TEATRO VA A EMPEZAR
Hoy va a comenzar una representación teatral, que no se cuánto tiempo me durará porque no quiero empalagar y lanzarla toda de una vez. Lo haré poco a poco para que el público común de España disfrute con mi obrita teatral.
Mi obra se llama, DIALOGO DEL PRÍNCIPE, EL SOCIO Y LA SOMBRA DE TARDAJOS. La escribí hace muchos años cuando Tardajos tuvo una gran acometida de lodos procedentes de la depuradora EDAR de Burgos. Nos inundaron literalmente los lodos y los bebimos, pues llegaron a nuestros propios grifos sin avisar, procedentes de una gloriosa planta de lodos que instalaron en un paraje llamado de San Antón.
En cuanto el ayuntamiento de Burgos compró nuestros terrenos (que no nos avisaron para qué los querían, y ya lo hicieron cuando legalmente no teníamos derecho a hacer alegaciones y por tanto no podíamos reclamar ya) como decía, una encerrona en toda regla. Cambiaron el nombre y a ese paraje que compraron lo llamaron "La Cuesta" porque como era suyo lo volvieron a bautizar y nos bautizaron y nos crucificaron a los de Tardajos también.
Como estaba indignada viendo a todos en casa enfermos me surgió esta obra. Yo no enfermé, os lo aseguro, y bebí aquel agua también. Pero a tal tiempo me dio por hacer dulce de membrillo y se ve que por eso no me entró descomposición pero sí una mala leche increíble que canalicé en mis escritos.
Después de todo aquello el juzgado de Burgos dictaminó que no pasó nada a la población de Tardajos, o sea, delirios de un pueblo, nada más.
Pero que se sepa, que no hubo justicia, y en parte tuvimos aquí la culpa. Porque tampoco se actuó con limpieza y porque el enemigo lo teníamos en casa.
Y la obra comienza en el siguiente comentario que haga.
Hoy va a comenzar una representación teatral, que no se cuánto tiempo me durará porque no quiero empalagar y lanzarla toda de una vez. Lo haré poco a poco para que el público común de España disfrute con mi obrita teatral.
Mi obra se llama, DIALOGO DEL PRÍNCIPE, EL SOCIO Y LA SOMBRA DE TARDAJOS. La escribí hace muchos años cuando Tardajos tuvo una gran acometida de lodos procedentes de la depuradora EDAR de Burgos. Nos inundaron literalmente los lodos y los bebimos, pues llegaron a nuestros propios grifos sin avisar, procedentes de una gloriosa planta de lodos que instalaron en un paraje llamado de San Antón.
En cuanto el ayuntamiento de Burgos compró nuestros terrenos (que no nos avisaron para qué los querían, y ya lo hicieron cuando legalmente no teníamos derecho a hacer alegaciones y por tanto no podíamos reclamar ya) como decía, una encerrona en toda regla. Cambiaron el nombre y a ese paraje que compraron lo llamaron "La Cuesta" porque como era suyo lo volvieron a bautizar y nos bautizaron y nos crucificaron a los de Tardajos también.
Como estaba indignada viendo a todos en casa enfermos me surgió esta obra. Yo no enfermé, os lo aseguro, y bebí aquel agua también. Pero a tal tiempo me dio por hacer dulce de membrillo y se ve que por eso no me entró descomposición pero sí una mala leche increíble que canalicé en mis escritos.
Después de todo aquello el juzgado de Burgos dictaminó que no pasó nada a la población de Tardajos, o sea, delirios de un pueblo, nada más.
Pero que se sepa, que no hubo justicia, y en parte tuvimos aquí la culpa. Porque tampoco se actuó con limpieza y porque el enemigo lo teníamos en casa.
Y la obra comienza en el siguiente comentario que haga.