El independentismo ensaya con el Barça
Los independentistas catalanes invadieron el Camp Nou en el clásico FC Barcelona – Madrid. La gran mayoría de los aficionados que llenaron el estadio eran independentistas catalanes. Aprovecharon el encuentro contra el partido de la capital española para arremeter contra la unidad de la nación.
Las peñas blaugranas de fuera de Cataluña se avergüenzan de toda esta situación y se sienten dolidas
Los nacionalistas convirtieron la competición deportiva en una vergonzosa reivindicación política donde el fútbol era lo menos importante. Nada más comenzar el encuentro, los manifestantes que asistieron a la machada mostraron una ‘senyera’ gigante que dio la bienvenida a los dos equipos.
Fueron 98.000 cartulinas las que formaron esa bandera catalana, con un texto en su parte trasera que pedía la independencia de la región española. Las juntaron para crear esa gran ‘senyera’ mientras sonaba el himno del equipo barcelonés.
El ambiente catalanista se avivó en el minuto 17, cuando miles de independentistas gritaron ‘independencia’ a la vez que ondeaban las banderas esteladas. Todo un circo político, donde la deportividad no existió por parte de los asistentes catalanes ni de algunos de los jugadores del equipo blaugrana.
Debido a todo este espectáculo bochornoso, el club azulgrana está comenzando a tener problemas fuera de su campo. Debido a las ideas separatistas que algunos miembros del club han realizado en público, con las que muchos seguidores no nacionalistas se han sentido insultados, se están encontrando con diversos obstáculos. Es más, en el partido de Sevilla fueron increpados para que ‘se fueran de España’.
Las peñas blaugranas de fuera de Cataluña se avergüenzan de toda esta situación y se sienten dolidas. Comienzan a renegar de la politización del fútbol. Seguidores del equipo catalán, han dejado de seguirlo porque se sienten insultados. Creen que los clubes no deberían opinar sobre cuestiones políticas.
Los independentistas catalanes invadieron el Camp Nou en el clásico FC Barcelona – Madrid. La gran mayoría de los aficionados que llenaron el estadio eran independentistas catalanes. Aprovecharon el encuentro contra el partido de la capital española para arremeter contra la unidad de la nación.
Las peñas blaugranas de fuera de Cataluña se avergüenzan de toda esta situación y se sienten dolidas
Los nacionalistas convirtieron la competición deportiva en una vergonzosa reivindicación política donde el fútbol era lo menos importante. Nada más comenzar el encuentro, los manifestantes que asistieron a la machada mostraron una ‘senyera’ gigante que dio la bienvenida a los dos equipos.
Fueron 98.000 cartulinas las que formaron esa bandera catalana, con un texto en su parte trasera que pedía la independencia de la región española. Las juntaron para crear esa gran ‘senyera’ mientras sonaba el himno del equipo barcelonés.
El ambiente catalanista se avivó en el minuto 17, cuando miles de independentistas gritaron ‘independencia’ a la vez que ondeaban las banderas esteladas. Todo un circo político, donde la deportividad no existió por parte de los asistentes catalanes ni de algunos de los jugadores del equipo blaugrana.
Debido a todo este espectáculo bochornoso, el club azulgrana está comenzando a tener problemas fuera de su campo. Debido a las ideas separatistas que algunos miembros del club han realizado en público, con las que muchos seguidores no nacionalistas se han sentido insultados, se están encontrando con diversos obstáculos. Es más, en el partido de Sevilla fueron increpados para que ‘se fueran de España’.
Las peñas blaugranas de fuera de Cataluña se avergüenzan de toda esta situación y se sienten dolidas. Comienzan a renegar de la politización del fútbol. Seguidores del equipo catalán, han dejado de seguirlo porque se sienten insultados. Creen que los clubes no deberían opinar sobre cuestiones políticas.