Ya, pero mira, no todos los chistes te hacen reír,...

José, Miguel, María y Tomás hablan sobre los empleos de sus sueños.
—Me gustaría ser abogado —dice José—, para así poder defender a mis compatriotas.
—Me gustaría estar en el congreso —dice Miguel—, para proponer leyes que beneficien a mis compatriotas.
—Yo quiero ser doctora —dice María—, para poder atender a mis compatriotas.
—Y tú, Tomás, ¿qué te gustaría ser? —preguntá José.
— ¡Yo quiero ser compatriota!

Bueno, los has contado mejores. Aprobado por mi parte.

Hay que penetrar en la esencia del chiste. No podemos quedarnos en la superficie.

Ya, pero mira, no todos los chistes te hacen reír, ni siquiera sonreír. Con tus chistes de lo buenos, me he reído mucho, con este lo siento, "na de na". Pero anda, por mí parte te apruebo.