Sobre todo el humor que no falte, ¡que delicia de abuelitas!
Eso, qué no falte el humor; pero las abuelitas del siglo XXI llevamos sandalias de plataforma, estamos al día en moda, organizamos tertulias en cafeterías progres y vamos a la peluquería a que nos arreglen la cabeza por fuera, claro, porque por dentro la tenemos bastante bien; igual que los abuelitos, ya no se parecen en nada a los personajes de Martínez Soria.
Saludos cordiales.
Saludos cordiales.
Tienes razón, las abuelas de hoy no vamos ni de negro, ni con la ropa por los tobillos