El mismo colega me contó otra de sus aventuras. Cierto día se montó en su barca y se introdujo mar adentro, cuando se dio cuenta la Cruz Roja lo rescató, le dio una manta térmica y tres bocadillos, y cuando se disponían a darle la tarjeta sanitaria dijo, oigan que soy español, entonces le quitaron los bocadillos, la manta térmica, le dieron cuatro bofetadas y le multaron por pescar sin permiso.