*YA NO SOY VIRGEN...!*
La familia cenaba tranquilamente cuando, de repente, la hija de 12 años comenta:
Tengo una mala noticia...!
* ¡Ya no soy virgen...!*
Y empieza a llorar, visiblemente alterada, con las manos en la cara y un aire de vergüenza.
Silencio sepulcral en la mesa, de repente, empiezan las acusaciones entre ellos.
El padre culpa a la madre y a la hermana por no vigilarla. La madre culpa al padre por no haber impuesto respeto en la familia. Y es esa la discusión.
Desconsolada y al borde de un colapso, la madre, con los ojos llenos de lágrimas y la voz temblorosa, toma tiernamente la mano de la hijita y pregunta bajito:
¿Cómo sucedió eso, hija mía?
Y, entre sollozos, la niña responde:
- ¡La maestra me sacó del pesebre..!
La Virgen ahora es Vanessa, y yo voy a ser la vaca..!
La familia cenaba tranquilamente cuando, de repente, la hija de 12 años comenta:
Tengo una mala noticia...!
* ¡Ya no soy virgen...!*
Y empieza a llorar, visiblemente alterada, con las manos en la cara y un aire de vergüenza.
Silencio sepulcral en la mesa, de repente, empiezan las acusaciones entre ellos.
El padre culpa a la madre y a la hermana por no vigilarla. La madre culpa al padre por no haber impuesto respeto en la familia. Y es esa la discusión.
Desconsolada y al borde de un colapso, la madre, con los ojos llenos de lágrimas y la voz temblorosa, toma tiernamente la mano de la hijita y pregunta bajito:
¿Cómo sucedió eso, hija mía?
Y, entre sollozos, la niña responde:
- ¡La maestra me sacó del pesebre..!
La Virgen ahora es Vanessa, y yo voy a ser la vaca..!
Muy bueno Mari, aunque a Angel no le haga ninguna gracia, a mí sí me ha gustado.