En el humor siempre hay que renovarse porque las cosas graciosas cuando se repiten mucho pasan a ser monótonas y no son tan divertidas. Yo recuerdo algunos chistes que me encantaban cuando eran nuevos para mi y que después de oírlos varias veces han perdido totalmente la gracia. Los cuento y todos los demás que no los conocen se ríen a carcajadas, pero para mi ya han perdido algo y no me emocionan igual.
O sea.
O sea.