Una viuda estaba llorando y lamentándose junto a la tumba, de las deudas que su difunto esposo le había dejado.
-Escucha Manuel Jose, ¿como es posible que me hayas dejado en esta situación?
-Tengo al cobrador del frac todo el dia en el rellano del piso que quiere cobrar.
-El piso de la playa, Manuel José, también nos lo han embargado.
-El coche, Manuel José, se lo ha llevado la financiera.
-A los niños, Manuel José, los han echado del colegio por no pagar.
-Desde que tu te fuistes, Manuel José, la nevera esta vacía.
Un señor que estaba presenciando la escena le dice... perdone Sra. pero usted se ha equivocado de tumba, ahí pone José Bernardo.
Y dice la viuda... si ya lo se, pero es que el nunca quiso tener nada a su nombre.
-Escucha Manuel Jose, ¿como es posible que me hayas dejado en esta situación?
-Tengo al cobrador del frac todo el dia en el rellano del piso que quiere cobrar.
-El piso de la playa, Manuel José, también nos lo han embargado.
-El coche, Manuel José, se lo ha llevado la financiera.
-A los niños, Manuel José, los han echado del colegio por no pagar.
-Desde que tu te fuistes, Manuel José, la nevera esta vacía.
Un señor que estaba presenciando la escena le dice... perdone Sra. pero usted se ha equivocado de tumba, ahí pone José Bernardo.
Y dice la viuda... si ya lo se, pero es que el nunca quiso tener nada a su nombre.
Pues si que era precavido el buen señor