Se celebran unos juegos olímpicos en LEPE, y en la inauguración el ILMO. Alcalde saca los papeles, y se dispone a pronunciar el discurso inaugural, ante todos los asistentes, y comienza: OOOH... (vuelve), OOOH... (y otra vez), OOOH, en esto un asistente de protocolo, ante el murmullo que se estaba haciendo en el público se acerca discretamente al Sr. Alcalde y le comenta: Sr. Alcalde perdone... pero los AROS OLÍMPICOS no se leen.