El recluta que está de puertas, recibe la orden del...

El recluta que está de puertas, recibe la orden del sargento, que no deje entrar a nadie que no lleve el traje de gala para asistir a las celebraciones que van llevar a cabo en el cuartel... En esto llega el teniente con ropa de calle y se dispone a pasar, ante lo cual el recluta le impide el paso, el teniente identificandose le ordena que no impida su entrada, ante lo cual el recluta le manifiesta que por orden del sargento no puede pasar nadie que no lleve traje de gala... El teniente viendo la cabezonería del soldado se vuelve camino de casa, cuando se cruza con el coche que llevaba al capitán, que iba todo engalanado con las medallas, galones, etc..., lo para y le comenta la situación (que un recluta no le deja pasar al cuartel por no llevar traje de gala), el capitán le dice que suba en el coche y le acompañe para poder pasar los dos... Una vez que llegan a la entrada, el soldado se fija que dentro iba, al que le había prohibido anteriormente el paso y dirigiendose a él le dice ¡pero no te dije antes que no podías entrar! ¡pues ahora no entras ni tú ni el torero!