DÍA 31 – 10 – 2022;
SE NOS VAN LOS SERES QUERIDOS
Nos paramos a pensar en nuestros seres queridos, que ayer estaban a nuestro lado, y hoy los sentimos muy lejanos, pero siempre muy recordados. En estas fechas de difuntos nos esforzamos por visitarlos. A veces recordándoles como fueron cuando vivían con nosotros. y nos sentimos tristes al ver como se pasa la vida. Esperando que esa cita que todos tenemos pendiente nos respete por mucho tiempo, Hay momentos que te invade la tristeza, al ver como el ambiente familiar va cambiando, No nos damos cuenta del poco tiempo que tenemos de estar en esta vida, y vivimos cada cual, a nuestra manera, sin darnos por enterados que en el momento menos esperado, nos toca cruzar el puente de ese camino que no sabemos dónde termina, ni siquiera a donde va. Yo tengo la esperanza de que algún ser querido cuando cruce ese puente me esté esperando, y me pueda conducir por un sendero de paz y amor profundo, sin que tengamos que pensar en el dinero ni otras cosas de interés, por lo que las familias se suelen romper en este mundo de intereses. Cuando piensas en el final del recorrido, notas que llegar sin grandes cargas, te da mucha paz y tu conciencia no tiene delirios, quizá por eso hay personas que lo afrentan con mucha tranquilidad y confianza, sin el miedo de que les pidan cuentas, Son seres que normalmente han caminado haciendo buenas obras, y dejando su huella para sus descendientes, que puedan ir por este mundo con la cabeza muy alta.
ROSARIO FAJARDO BLANCO.
SE NOS VAN LOS SERES QUERIDOS
Nos paramos a pensar en nuestros seres queridos, que ayer estaban a nuestro lado, y hoy los sentimos muy lejanos, pero siempre muy recordados. En estas fechas de difuntos nos esforzamos por visitarlos. A veces recordándoles como fueron cuando vivían con nosotros. y nos sentimos tristes al ver como se pasa la vida. Esperando que esa cita que todos tenemos pendiente nos respete por mucho tiempo, Hay momentos que te invade la tristeza, al ver como el ambiente familiar va cambiando, No nos damos cuenta del poco tiempo que tenemos de estar en esta vida, y vivimos cada cual, a nuestra manera, sin darnos por enterados que en el momento menos esperado, nos toca cruzar el puente de ese camino que no sabemos dónde termina, ni siquiera a donde va. Yo tengo la esperanza de que algún ser querido cuando cruce ese puente me esté esperando, y me pueda conducir por un sendero de paz y amor profundo, sin que tengamos que pensar en el dinero ni otras cosas de interés, por lo que las familias se suelen romper en este mundo de intereses. Cuando piensas en el final del recorrido, notas que llegar sin grandes cargas, te da mucha paz y tu conciencia no tiene delirios, quizá por eso hay personas que lo afrentan con mucha tranquilidad y confianza, sin el miedo de que les pidan cuentas, Son seres que normalmente han caminado haciendo buenas obras, y dejando su huella para sus descendientes, que puedan ir por este mundo con la cabeza muy alta.
ROSARIO FAJARDO BLANCO.