¡Muchas gracias por tu amabilidad!
¡Qué belleza de plato, es una preciosidad, raiola! No me canso de mirarlo.
Por
curiosidad he buscado el hotel de procedencia, y el edificio y el entorno son preciosos. Debió de ser un lugar de encuentro de la alta sociedad de finales del XIX y principios del XX. Es uno de los balnearios más antiguos de Europa, según he leído en
Internet. ¡El plato es tan bonito como el edificio de donde procede!
Un cordial saludo.