El 4 de agosto de 1939, desde la cárcel madrileña de...

El 4 de agosto de 1939, desde la cárcel madrileña de Ventas, Julia una de estas trece mujeres le escribiría a su madre “madre, madrecita, me voy a reunir con mi hermana y papá al otro mundo, pero ten presente que muero por persona honrada. Adiós, madre querida, adiós para siempre. Tu hija que ya jamás te podrá besar ni abrazar… Que no me lloréis. Que mi nombre no se borre de la historia.” Estas fueron las últimas palabras de Julia Conesa Conesa, una de “las trece rosas”.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Esa misma carta la pudieron escribir muchas criaturas
que fusilaron los compañeros de la niña tambien fueron criaturas
y tambien tenían madre y tampoco hicieron nada solo que se declaraban
catolicos/as pero callaron y la cobardía de algunos al no cantarlo
como esto se está haciendo ahora.
En los dos bandos hubo rosas, claveles y jazmines
haber sin en alguna ocasión tiene la decencia de poner
algunas niñas del otro bando asesinadas por los suyos.
A ver comunista de M......... recuerdenos los chiquillos que asesino
la maldita ETA que son mas recientes y que no les dieron la oportunidad
de escribirle a sus madres, venga valiente si los de 90 años si lo recuerdas
recuerda tambien esto que tu blanqueas.
Y los 13 seminaristas que no hicieron mal a nadie ¿qué?
Dejemos en paz a lo que pasó hace 90 años y centrémonos en lo que acontece ahora, que no puede ser más lamentable.
El 7 de noviembre del 1936 desde la checa de Madrid
uno de los niños de los mas de 50 no le escribio a su madre pero si lo hubiese
echo diría mas o menos lo mismo.
Madre madrecita querida del alma en el pecho yo llevo una bala
pronto me reunire con papa en el mas aya o como somos catolicos en el cielo
yo no hice nada soy honrrado pero de madrugada nos sacaran para llevarnos al
cerro lo haran de noche para que nadie vea los crimenes que se están haciendo
adios madrecita nunca te besaré mas ... (ver texto completo)