Lo malo de todo ésto es que quitarse un burka significa quitarse siglos de ostracismo, y eso difícilmente se puede hacer de la noche a la mañana.
Es difícil ayudar a quien quiere quitarse el burka, si fuese sólo regalarle un vestido nuevo sería fácil, pero no es sólo éso.
Cambiar el burka por un vestido es cambiar la mentalidad, y eso cuesta.
Es difícil ayudar a quien quiere quitarse el burka, si fuese sólo regalarle un vestido nuevo sería fácil, pero no es sólo éso.
Cambiar el burka por un vestido es cambiar la mentalidad, y eso cuesta.